Entrega nº 93. 13 de agosto

-Grandes y pequeñas historias, en cinco partes (continuación)

(Tierra) Con las largas lluvias de los últimos tiempos, se han producido deslizamientos de tierra en algunos lugares que a veces han causado muertes y lesiones. Entre ellos, el que ocurrió a lo largo del camino que corre por el Servicio de la Administración de Marina en Yokosuka, que fue el más dañino, y parece que diez adultos y tres niños quedaron enterrados de una ¡los pobres!

Frente a mi modesta casa sale el Callejón de las currucas (Uguisu yokochô): el nombre parece el de un lugar tranquilo, pero es un pequeño callejón muy empinado y, de invierno a primavera, incluso a los zuecos más altos de madera los cubre el barro, por lo que no es raro que quienes pasan por primera vez, se manchen los calcetines blancos. En los últimos tiempos, aunque es verano, debido a las largas lluvias, aparecieron grietas en la tierra frente a mi casa, y las personas que no estaban atentas, se escurrieron al llevar unos zuecos bajos ¡los pobres!

(Metal) En la acería de Edamitsu, los altos hornos han sufrido un parón. En nuestra cocina, como tenemos que encontrar formas de calmar la sequedad de garganta causada por el calor, compramos una gran tetera de latón en la que hacemos infusiones de cebada tostada.

(Agua) Llegó la temporada de lluvias y llovió. Pasó la temporada de lluvias y volvió a llover. El tiempo del calor llegó, llovió; y luego… todavía llueve. El cielo está lluvioso o nublado sin interrupción, por lo que en todas partes los ríos están inundados, sean grandes o pequeños, y a veces anegan las casas o los campos. Los gobios sin duda deben estar muy felices, pero esto causa una terrible destrucción a los humanos.

La piedra de tinta generalmente colocada junto a mi almohada está en un recipiente estrecho y poco profundo, pero, aun así, hasta ahora nunca se me ha desbordado agua cuando lo he llenado, incluso cuando le he puesto bastante. Esto se debe a que tiene unos delgados surcos excavados a ambos lados, que aparentemente no sirven para nada, pero evitan que finalmente se desborde el agua. Con esta técnica, ¿qué gran río podría quedar sin ser controlado? (Fin)

 

Notas del traductor y las fuentes

El arsenal naval de Yokosuka, a unos sesenta kilómetros al sur de Tokio, fue construido bajo la dirección del arquitecto naval F. Léonce Verny (1837-1908) entre 1866 y 1871. El primer buque de guerra salió del astillero en 1872. También desarrolló allí labores de ingeniería naval trascendentes para la Armada japonesa el ingeniero Louis-Émile Bertin (1840-1924), desde 1886 hasta 1890.

– En 1901, en Edamitsu, al norte de Kyûshû, se establecieron las acerías conocidas como «Yahata seitetsu», responsables del desarrollo industrial de la región. Puede leerse sobre estas en el artículo “Modernización, Estado e industria siderúrgica en Japón durante el periodo Meiji”, de Martha Loaiza Becerra, clicando aquí.

– En Japón, es famoso el Mugicha, o Té japonés de cebada tostada, que Shiki apreciaba mucho.

– Shiki habla del “tiempo del calor” para referirse al período de finales de julio y principios de agosto, considerado el más caluroso del año en el antiguo calendario. A veces, lluvias y calores extremos se alternan en las islas. En 2018, Japón vivió una ola de calor sin igual en la historia del país: después de las inundaciones y los deslizamientos de tierra que duraron desde finales de junio hasta mediados de julio de 2018, una extensa ola de calor se extendió a través de la isla principal de Japón. En las prefecturas afectadas por las inundaciones y los deslizamientos de tierra, Hiroshima, Okayama y Ehime, 145 personas fueron hospitalizadas con síntomas de insolación, ya que las temperaturas allí superaron los 35ºC. El 15 de julio, 200 de las 927 estaciones en la red de observación nacional registraron temperaturas máximas superiores a 35° C. El 23 de julio, se observaron unas temperaturas de más de 41° C.