«A los doce años sabía dibujar como Rafael,
pero necesité toda una vida para aprender
a pintar como un niño»
PABLO PICASSO
El ego es una trampa que no permite evolucionar el espíritu.
Soltarlo es un aprendizaje que incentiva a liberar la mente.
En cada pincelada abstracta sentí que, al plasmar la pintura,
lo peor es “copiarse a sí mismo”.
En esa búsqueda llegué a los Haikus (poemas japoneses).
Paseos Net , El Rincón del Haiku. aún sigo en el aprendizaje.
Sin llegar al automatismo pude expresar en la pintura un nuevo instante para vivenciar la naturaleza.
No fue fácil!!!
Despojarme de intelectualismos, estructuras y «romanticismo occidental»,
ese ruido mental que acecha se aplacó cuando «acepté mis sombras»
Solté la niña interior…
Mis caminatas hacia el parque que otrora eran un ir y venir, hoy las vivencias tienen otra mirada.
No pinto como una oriental, soy una mujer occidental inspirada en oriente.
Nací en el centro de la ciudad de cemento, (Rio Cuarto- Cba- Argentina)
hoy vivo lejos, rodeada de árboles frutales y otros propios de esta selva.
pude reconciliarme con la Naturaleza Madre de los haikús, así como la Pachamama
es a la tierra.
La mirada cambió, todo fluye, le coloco alas a los hks y pinturas, nada nos pertenece,
todo tiene su vuelo.
Sigo en el proceso: en la unión espontánea de haikús y artes visuales,
No hay prisa, puedo expresarme libremente, quizás no a una ilustración
del hk , soy consciente no respondo al sumie tradicional ni a un collage.
La libre expresión se encausa… las estructuras occidentales han quedado en el pasado.
paso a paso… la mirada cambia
Agradezco a compañeros y guías.
Pájaros en la lluvia
dejan su trino
en el frescor de las gotas
esa garúa
con el viento que sopla
huele a magnolia
Templo nevado
La paloma deja huellas
a media luz.
Viento del sur
En la tumba sin nombre
un lirio de agua
manguera rota
riega a su paso
las margaritas
Monte nevado
las huellas del ternero
en la oscuridad
suena en la cáscara
el pico de un pollito
Llovizna
Luna de agosto
En el cuenco aún brilla
la gota de rocío
Cerro Uritorco
Un perro se detiene
ante la tumba.