Como cierre a esta serie de artículos en la que hemos conocido cómo se vive el haiku en distintos lugares del planeta, nos acercamos a una de las familias más representativas del haiku en Japón. Más de un siglo separan los haikus de Kyoshi Takahama de los de sus bisnietos Hoshino Takashi y Toshiki Bojo, más de un siglo de momentos irrepetibles, de instantes vividos y compartidos unidos por una manera muy particular de entender el haiku.
Como complemento a la historia de estas generaciones de haijines una selección de más de cien haikus de Takahama Kyoshi, la mayoría de ellos inéditos en español.
Kyoshi Takahama nace el 22 de febrero de 1874 en lo que ahora es la ciudad de Matsuyama en la prefectura de Ehime. Su verdadero nombre era Kiyoshi Ikenouchi.Su padre, Ikenouchi Masatada, era un antiguo maestro de samurai y esgrima, también apasionado por el teatro tradicional. Sin embargo, con la restauración Meiji, pierde sus deberes oficiales y se retira convirtiéndose en agricultor. Kyoshi crece en un entorno rural, lo que influye en su afinidad con la naturaleza. A los nueve años, heredo la familia de su abuela y tomó su apellido, Takahama.
Siendo muy joven, a la edad de 17 años, Kyoshi comenzó a interesarse por el haiku y escribió una carta a Shiki Masaoka (1867-1902), que nació en la misma ciudad natal y tenía siete años más que él. Conoce a Shiki por Hekigodo Kawahigashi (1873-1937), un compañero y amigo de Iyo Jinjo Chugakko (Iyo Ordinary Middle School) en Matsuyama.
Shiki fue el que creó para él el seudónimo de Kyoshi, basado en su similitud con su nombre real, Kiyoshi. Pronto deja la universidad, a pesar de que Shiki le había aconsejado lo contrario, para trabajar como editor y crítico literario para la revista literaria Nihonjin. Mientras trabaja, también publica haikus. Se casa en 1897 con Ito Oshima, la hija de su casero, de cuyo matrimonio nacerían cinco hijos.
Kyoshi y su esposa Ito
By 朝日新聞社 – 『アサヒグラフ』 1949年新年号, Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=34910569©
En aquella época conoce a Natsume Soseki, con quien compartiría una larga amistad.También se hace cargo de la columna de haiku del “Kokumin Shimbun” (Periódico Popular) mientras ayudaba a Masao Ikenouchi, su hermano mayor, a dirigir una casa de huéspedes.
En 1898, Kyoshi Takahama asumió la dirección de la revista haiku «Hototogisu» (El cuco) que Kyokudo Yanagihara y Shiki Masaoka habían cofundado el año anterior. En “Haiku Nyuhmon” (Un primer paso hacia el haiku), publicado en abril de ese mismo año, subrayó la importancia del ritmo musical de las palabras, describiendo cómo el haiku y la pintura se corresponden en muchos aspectos. Como el funcionamiento de “Hototogisu” se hizo más difícil, Kyoshi decidió trasladar su editorial a su propia casa.
En 1902 fallece Shiki. Kyoshi se encontraba en aquel momento con él:
Shiki yuku ya juhshichi nichi no getsumei ni
Shiki falleció.
La luna en su decimoséptimo día
serenamente brillante.
«Salí al jardín alrededor de la medianoche. La hermosa luna estaba arriba en el cielo, por encima de los enrejados de calabaza. Mirándola, mi corazón estaba lleno de una emoción inefable»
Kyoshi escribió principalmente novelas desde 1907 hasta 1912, con títulos como “Haikaishi” («El maestro de Haiku»), que apareció como una fotonovela en los periódicos, “Bonjin” («Una persona común») o “Chōsen” («Corea»).
En 1912 sufrió de fiebre tifoidea, lo que le hizo ser cauteloso con su salud, y por ello trató de no agotar sus fuerzas físicas escribiendo novelas. Sentía que escribir prosa requería mucha más fuerza que el haiku, así que decidió que la escritura haiku sería más adecuada para él.
Las diferencias de opinión en cuanto al haiku se hacen cada vez más notorias entre Hekigodo Kawahigashi y Kyoshi. En aquellos días, el grupo de poetas afines a Hekigodo defendía la composición del haiku sin el uso de palabras estación (kigo) o la regla de 17 sílabas fijas dispuestas en grupos de tres palabras de cinco, siete y cinco sílabas. Este tipo de haiku se llama jiyuhritsu (metro de estilo libre) -no se ajusta a la forma tradicional y justifica la composición hipermetrica e irregular. Seisensui Ogiwara, Hosai Ozaki y Santoka Taneda son el claro ejemplo de los que se comprometieron con este tipo de haiku.
A la edad de 39 años, en 1913, Kyoshi decidió volver a los círculos de haiku.
shimo fureba shimo wo tate to su nori no shiro
Si hay una helada
la usaré como escudo
en el castillo de la ley.
Escéptico ante la nueva tendencia impulsada por el grupo de Hekigodo, Kyoshi consideraba el haiku como un arte literario que estaba profundamente conectado con la tradición y las convenciones. Su teoría es que los poetas de haiku son capaces de producir obras originales y no deben poner en palabras lo que sea que vean. En su lugar, deberían hacer un esfuerzo por mirar más de cerca y añadir algo innovador. Publicó entonces “Haiku towa Donna Mono ka” (¿Qué clase de arte es el Haiku? 1914), “Haiku no Tsukuriyoh” (Cómo componer Haiku, 1914), y “Susumubeki Haiku no Michi” (El camino por el que el Haiku debe avanzar, 1918).
Además de esto, continúa escribiendo noticias, modifica “Hototogisu” y escribe otra novela, “Futatsu Kaki” («Dos caquis «, en 1915). También comienza a mostrar interés en el teatro tradicional Noh y él mismo escribe algunas obras de teatro.
El 1 de junio de 1927 Kyoshi, como parte de un discurso, definió el haiku como poesía de kachoh-fuhei (composiciones poéticas sobre pájaros y flores) – esto ha sido ampliamente aceptado por la mayoría. En su discurso, expuso su concepto general de kachoh-fuhei, las características de los materiales de haiku, y la diferencia entre haiku y otros géneros literarios.
Para Kyoshi, el haiku es una composición de poemas que describe los fenómenos de la naturaleza que tienen lugar de acuerdo con el cambio de estación, así como los fenómenos de los asuntos humanos que los acompañan. En segundo lugar, lo que ha sido comúnmente compartido por la mayoría de los poetas haiku es el arte de usar la belleza de la naturaleza como centro del tema. En tercer lugar, aunque las obras de teatro y las novelas son las más frecuentes en la literatura, se debe permitir la admisión de escritos de diversa índole en la extensa escena literaria. Entre ellos, el haiku tiene su propio valor como forma literaria en la que, distanciándose de los conflictos y enredos, se vierte amor por la naturaleza, se recibe afecto de la naturaleza en respuesta y se representa la naturaleza.
toshi wo motte kyojin to shitari ayumi saru
Considerando el año pasado
como un gigante.
Me marcho.
Mientras que el año pasado se personifica y se describe como un gigante que pasa, el poeta se aleja de su yo del año anterior, dándose cuenta de que la actividad de cada uno puede ser insignificante en comparación con el lapso de tiempo que constituye la Historia.
Muchos seguidores apoyaron su visión del haiku, y “Hototogisu” se convirtió en una importante revista a la que un gran número de poetas contribuyeron con sus haikus.
ikanago ni mazu hashi oroshi haha koishi
Para comer lanzón
primero pongo mis palillos en el suelo.
Anhelo a mi madre.
Lanzón: pez que habita en el Océano Atlántico y el Océano Pacífico.
En 1936 viaja a Europa. Durante su estancia en Londres escribe:
fumite sugu daisy no hana okiagaru
Justo después de pisar
las flores de las margaritas
se levantaron.
suzumera mo hito wo osorenu kuni no haru
Los gorriones
tampoco le temen a la gente-
La primavera en el campo
Ajeno a todo el debate generado en torno a su postura respecto al haiku, Kyoshi hizo todo lo posible para no estar involucrado en el mencionado debate ni desconcertado por las cosas que sucedieron en el mundo del haiku en aquellos años y Hototogisu alcanzó su edición número 500 en 1938.
Cuando se fundó Nihon Haiku Sakka Kyokai, la Asociación de Escritores Japoneses, Kyoshi asumió el cargo de presidente. Algunos poetas abogaron por el haiku de verso libre o ritmo interno sin la forma silábica de 5-7-5 y sin kigo. Aunque no estaba de acuerdo con ello, se vio obligado a incluir a estos escritores en la asociación, después de que las autoridades educativas del gobierno japonés le aconsejaran que lo hiciera. La presión surgió como resultado del movimiento contra la guerra, en el que participaron poetas de haiku en 1941.
ohzora ni mata waki-ideshi kotori kana
Una vez más en el cielo azul
comienzan a cantar.
Pajaritos
En 1942, Nihon Haiku Sakka Kyokai se convirtió en Nihon Bungaku Hokokukai Haiku-bu (División Haiku, la Asociación de Literatura Japonesa de Servicio Nacional), con Kyoshi como presidente.
En marzo de 1951, Toshio, hijo de Kyoshi, se hizo cargo de la columna de haikus de Hototogisu. Kyoshi se dedicó a “Tamamo”, la revista de haiku presidida por su hijaTatsuko, ya que la consideraba un lugar apropiado para su actividad tras su jubilación. Aunque Kusadao Nakamura y otros poetas de la generación más joven se dedicaron a publicar haikus de naturaleza y pensamiento social, Kyoshi, que no se sintió conmovido por la tendencia de la nueva era, persistió en su visión del haiku tradicional y no se avergonzó de hablar de sí mismo como un luchador de sumo yokuzuna del más alto rango en el mundo del haiku.
Sorame shite hitai ni ataru fuyubi kana
Una mirada hacia arriba,
en la frente
brilla el sol de invierno.
Aratamete taiko uchidasu uramatsuri
Después de un tiempo
empiezan a golpear el tambor de nuevo:
un festival a la orilla del mar
Kyoshi publicó “Kyoshi Jiden” (Kyoshi, una autobiografía, 1955), “650 Ku” (Una selección de 650 Haiku, 1955), y “Ku Nikki” (Un diario de Haiku, 1958), expresando los sentimientos de sus últimos años.
El famoso haiku sobre el viento otoñal es considerado por los críticos «un autorretrato del poeta en su vejez».
akikaze ya kokoro hagesite kuchi tomaru
El viento de otoño,
todo se desvaneció en mi corazón.
Ni una palabra que decir….
Takahama Kyoshi vivió su vida con dignidad y logró mantener su postura por encima de luchas de clases, de revoluciones artísticas, de la posguerra y la devastación. Entre los socios, amigos, discípulos y seguidores de la tradición de Hototogisu están los mejores haijines del siglo pasado.
Yamabuki no kuki no aosa ni hana imada
El color del tallo de la kerria japonesa
es verde:
Las flores no han salido
Mirando este haiku, que escribe ya anciano, es evidente que Kyoshi era un hombre de temple que todavía tenía un trabajo al que se dedicaba y que sentía como si lo mejor de su vida estuviera todavía oculto y que aparecería en los años venideros.
Fuyugare ni ware wa tatazumi hito wa yuku
En una desolada escena invernal
me quedo quieto
mientras que la gente pasa.
Desafortunadamente, el 1 de abril de 1959, en el año 34 de Showa, tuvo una hemorragia cerebral y cayó en coma. Justo antes de las 4 de la mañana del 8 de abril su corazón dejó de latir. Se celebró un funeral sólo para los miembros de la familia, y fue enterrado en el cementerio del Templo Jufukuji en Kamakura. Tenía 85 años.
Se le otorgó la Orden del Tesoro Sagrado de primera clase a título póstumo.
Hoy, Kyoshi sigue siendo referencia mundial para todos los amantes del haiku y sus poemas cautivan a cientos de seguidores.
yuragi miyu hayku no tsubaki ga sanbyaku ni
Viendo cien camelias
temblar ligeramente.
Veo trescientas
Gran amante de las camelias, Kyoshi tenía infinidad de ellas plantadas en el jardín de su casa de Kamakura.
LA SEGUNDA GENERACIÓN
Takahama Toshio: Hijo mayor de Kyoshi, nació el 16 de diciembre de 1900 en Tokio.
Se graduó en la Escuela Superior de Comercio de Otaru (más tarde Universidad de Comercio de Otaru) Animado por su padre, también destacó como haijin, fundando la revista “Haicai” (Haiku) (1938). Trabajó para popularizar el renku (poemas largos de haiku). Sucedió a su padre como director de “Hototogisu” en 1959 hasta su muerte en 1979.
kawarake ni shimiyuku miki ya hatsumôde
sake sagrado
en la loza de barro.
Santuario de Año Nuevo
“Prose with a poetic haiku flavor” (Takahama Toshio complete works) (1996) Tankobon Hardcover – Editor: Umezato Shobo
(“Prosa con un sabor poético, obras completas de Takahama Toshio”)
Tsukihanasu mizao ya iwa no sumiregusa
Íbamos a chocar,
el remo contra la roca
donde florece la sumiregusa.
Monumento de Takahama Toshio en Ishikari
Hoshino Tatsuko (1903-1984) nació en Kōjimachi, Tokio, y era la segunda hija de Takahama Kyoshi. Después de casarse con el nieto de Hoshino Tenchi, fue animada por su padre a empezar a escribir haiku y pronto mostró un talento asombroso.
En 1930 Kyoshi funda la revista “Tamamo” exclusivamente para mujeres y le cede su dirección a Tatsuko. Dos años más tarde, ella se unió al círculo literario
de “Hototogisu” donde compartió la posición de liderazgo con Nakamura Teijo. A ambas se les unieron más adelante Hashimoto Takako y Mitsuhashi Takajo.
En 1937 Hoshino publicó su primera antología de haiku, a la cual siguieron otros volúmenes incluyendo “Kamakura”, “Sasame” y “Jitsui”. Su estilo permaneció fiel a la insistencia de su padre en las formas tradicionales, y en el uso del simbolismo natural, pero unido a su amor por la naturaleza y una aproximación suave y femenina a la vida diaria.
Después de la muerte de su padre, Hoshino se convirtió en la seleccionadora de haiku para el periódico “Asahi Shimbun”, y contribuyó en columnas de haiku en varios diarios y revistas.
La belleza del cielo
efímera como un vuelo
de ocas salvajes.
Además de haiku, publicó también documentales de viaje, incluyendo “Tamamo haiwa” («Historias del Grupo Tamamo») y “Yamato Seki-Butsu” («Budas de Piedra de Yamato»).
Hoshino empezó viviendo en Kamakura, en la prefectura de Kanagawa en 1911, siguiéndole un corto periodo en Tokio, volvió a Kamakura en 1931, creyéndolo un lugar ideal para criar a sus hijos. Falleció en 1984 a la edad de 80 años. Su tumba se encuentra en el templo de Jufuku-ji en Kamakura.
Tatsuko ya tuki o aogu
Mi nombre Tatsuko
me lo dio mi padre:
Miro a la luna.
Tatsuko significa “niño que está de pie”
samushi to wa kono yo no koto yo haka ogamu
Frío
de eso se trata este mundo.
Rezo en su tumba
enpitsu de kaku oto shizuka chuurippu
El sonido silencioso
de escribir con lápiz.
Tulipanes
hatsu tsubame kyoo no tame naru chindonya
la primera golondrina –
una banda de Chindonya
sólo por hoy.
Chindonya ちんどん屋: Músico de la calle.
Haruko Takagi, tercera hija de Kyoshi, nació el 9 de enero de 1915 en la Prefectura de Kanagawa.
Al igual que su padre, fue miembro de “Hototogisu” y más tarde presidenta del grupo literario “Tamamokai” Publicó varios libros, algunos dedicados a su padre, así como una variada obra poética: “Kyoshi Takahama at kew”, publicado en 1960, “Seikyo: kushū” (1977), “Takagi Haruko shū” publicado en 1978 , “Harukanaru chichi Kyoshi” (1983), “Haruko kushū” o “Mihotori”
Falleció el 22 de Octubre del año 2000.
¡Ser un oso
invernando
al fondo de su cueva!
naga tsuyu ni arugamama naru koto wa yoki
Larga estación de lluvias.
Es bueno que las cosas sean
lo que son.
fukurô mo kitsune mo nakishi mukashi shiru
Conozco
los viejos tiempos
cuando un búho y un zorro lloraban
La cuarta hija de Takahama Kyoshi falleció de forma prematura. Esta fuerte experiencia se manifestó en el haiku y en la vida de Kyoshi, que siempre tuvo presente la fugacidad de ésta.
Este haiku lo compuso en aquel duro momento:
haruoshimu rinnenotsukihi madoniari
El sol y la luna,
transmigrando en la ventana.
Aprecio la primavera que se va.
Su otro hijo varón, Tomojirō Ikenouchi, nacido el 21 de octubre de 1906 en Tokio y fallecido en esa ciudad el 3 de marzo de 1991, fue compositor musical. Estudió música en el Conservatorio de París, a donde llegó en 1927 y allí estudió con Lazare Lévy piano y con Henri Büsser composición. Tuvo una gran influencia como profesor en la Universidad de las Artes de Tokio. Fue nombrado Caballero de la Legión de Honor en 1952. Fue el único que no se dedicó al haiku en la familia.
LA TERCERA GENERACIÓN
Hoshino Tsubaki, hija de Tatsuko, nieta de Kyoshi, nació en 1930 en Tokio.
Una de las haijines más influyentes de Japón, Tsubaki es una haijin neoclásica por excelencia.
El mar se extiende
hasta donde se puede ver.
el cielo azul de mayo
Su nombre, Tsubaki, significa camelia, claro homenaje a su abuelo Kyoshi.
hototogisu naku kata no mado akete oku
Dejo la ventana abierta
donde un cuco
está cantando
yuuu-Fuji ni eda sashi-nobete kaeri-bana
Una rama que se estira
hacia el monte Fuji,
un florecimiento fuera de temporada
Kamakura wa nami no oto yori ake yasushi
En Kamakura
el amanecer rompe con el sonido de las olas,
cada vez más temprano
Kamakura es donde Kyoshi vivió y trabajó la mayor parte de su vida después de dejar su ciudad natal, Matsuyama. Tsubaki y su hijo, Takashi, han fundado allí un museo de haiku en honor de Kyoshi y de la madre de Tsubaki, Tatsuko. El museo se ha convertido en un centro de estudios y composición de haiku. Como indica el haiku, los residentes de este pueblo costero siempre están conscientes del mar.
higurashi no soroeba tsuki mo noborikeri
cuando las cigarras de la tarde
están todas allí
la luna empieza a salir
Inahata Teiko, nace el 8 de enero de 1931 en Yokohama. Hija de Takahama Toshio y nieta de Kyoshi, comenzó a escribir haiku desde su más tierna infancia, al igual que todos los niños de su familia.
“Crecí en una casa donde escuchaba la reuniones de poetas escribiendo haiku o reunidos para estudiar el Sarumino, un libro de Bash, bajo la dirección de mi padre. Yo también lo acompañaba a ginko o a salidas a contemplar la naturaleza y hacer haiku. Intentaba copiar a los poetas en sus gestos y en su forma de escribir haiku. Siempre me he sentido muy agradecida de ese ambiente favorable de mi vida” cuenta Teiko de su infancia.
Se casó en 1956 y ha tenido dos hijos y una hija.
Sus haikus, escritos durante todos estos años, fueron recopilados y publicados en 1976 en el libro “Teiko Kushu” (The collected haiku of Teiko) en 1976.
Tras la muerte de su padre ella asumió su lugar en “Hototogisu”. En el año 1985 publica “Teiko Daini Kushu” (The Second collected haiku of Teiko).
Dos años después funda la Asociación Japonesa de Haiku Tradicional, de la que es directora. Desde entonces ha viajado incansablemente por toda Europa, Norteamérica y China. Es la directora del Kyoshi Memorial Museum, dedicado a la figura de su abuelo y miembro de la Asociación Internacional de Haiku. Además es la encargada de la publicación de haiku en el prestigioso periódico Asahi Shinbun.
Ha publicado entre otras obras “Teiko Daisan Kushu” (The Third Collected Haiku of Teiko) en 1990, “Shoji Akari” (Light trough the screens) en 1996, y “Sayuragi” (Suave Balanceo) en 2001.
Además ha intentado acercar el haiku a todo tipo de personas a través de sus libros “Shizen to katariau yasashii haiku” (Haiku fácil para hablar con la Naturaleza) 1978, y “Haiku ni shitashimu” (Crecimiento familiar con el haiku) 1985.
En uno de sus textos, “Invitación al haiku”, dice:
“Una flor es hermosa, luego cae y muere… La naturaleza nos ofrece la belleza y la emoción por un lado, pero por otro la fealdad y el terror. Cuando tu corazón, tocado por la naturaleza, aprende a pensar, a sentir, a agradar, a lamentarse, a anhelar, a compadecerse, es donde nace el haiku. Las hierbas desconocidas al borde del camino muestran la fuerza de la vida mientras una cáscara vacía de cigarra habla de la maravilla de la vida. La compasión por lo que sucede en cada una de las cuatro estaciones da a luz al haiku”.
tada inoru rakka utsukushi karishi hi ni
nada como una oración
en este día cuando las flores de cerezo
caen bellamente
kyô nanimo kamo nanimo kamo haru rashiku
Hoy,
todo, en todas partes
dice primavera.
sora to iu jiyû tsuru maiyamazaruwa
en la libertad del cielo
las grullas
vuelan incesantemente.
LA CUARTA GENERACIÓN
Hoshino Takashi: Nació en la Prefectura de Kanagawa en 1952. Hijo mayor de Tsubaki Hoshino, nieto de Tatsuko Hoshino, y bisnieto de Kyoshi Takahama. Comenzó a escribir haiku en su adolescencia, estudiando con su abuela Tatsuko. Es presidente de la revista haiku «Tamamo», director del Kamakura Kyoshi Tatsuko Memorial Museum, miembro de la Asociación de Haiku Clásico Japonés, miembro de la Asociación de Escritores Japoneses, conferenciante del Centro Cultural Asahi y miembro de la revista Hototogisu. Ha publicado muchas colecciones de haiku, incluyendo “Zankyo”.
Durante un viaje a España en 2014 comentó: “He oído que actualmente se está produciendo un boom del haiku en España, y que la población de haiku ha alcanzado hasta 10.000 personas. También han publicado varias revistas de haiku”
乾鮭や顔半分は無表情
Un salmón seco:
La mitad de su cara
no tiene expresión
“El buen haiku no puede ser producido simplemente usando palabras que son difíciles de entender; el haiku que se compone de palabras que se usan en conversaciones regulares es mucho más fácil de entender por los lectores. Para ello, en lugar de dejar la interpretación en manos del lector, es importante componer pensando en el público. Mi objetivo es escribir haiku que de alguna manera pueda traer alegría y felicidad al lector”
ame no na mo iroiro arishi kure no aki
Tantos nombres diferentes
para la lluvia….
final del otoño
shûsei ya rinchû ni aru ikoi ishi
Voz de otoño-
una piedra relajante
en el bosque
mitubishi no kamon ni tomari akatombo
Sobrevolando
el escudo de la familia Mitubishi
una libélula roja
akikaze no ushiro ni zôkibayashi ari
Detrás
del viento otoñal,
un matorral
soretonaku umi o miteori iwashigumo
Indirectamente
observando las nubes de sardinas
del océano.
hoshizora ni daishô wa naku hi’iragi sasu
Estrellas en el cielo
no hay diferencia de tamaño
una rama de acebo en la puerta
El último día de invierno, aproximadamente el 3 de febrero, los japoneses ponen una rama de acebo con cabeza de sardina en la entrada para defender su casa de espíritus malignos.
akatombo yûyake wa mada saki no koto
Libélula roja
un montón de tiempo todavía
antes de la puesta del sol
Toshiki Bohjoh, nació el 7 de julio de 1957. Es nieto de Toshio y bisnieto de Kyoshi.
Toshiki se graduó en la Universidad de Gakushuin, es el editor de la revista de haiku “Flores y pájaros” Kachoo 花鳥 y miembro del Grupo Hototogisu Haiku y a menudo modera programas de haiku de la NHK. Editor en jefe de la revista de haiku «Hanatori» y director de la Asociación de Haiku Tradicional de Japón, al igual que su bisabuelo, es partidario de escribir haikus sencillos con kigo.
ushi mitsu no kuriya no banana magaru nari
En la oscuridad de la noche
el plátano en la vieja cocina
está doblado.
Su madre es Nakako Bojhoh la nieta a quien Kyoshi dedicó este haiku para animarla cuando entró en la escuela de enfermería:
shunchohni tatoirokaiwa omokutomo
Incluso si el remo es pesado
a contracorriente
de la marea primaveral
Kyoshi ujoo kyoshi ki hihijoo namu amida
Misericordioso Kyoshi
no el misericordioso Día de Recuerdo a Kyoshi.
Namu Amida.
Kyoshi había escrito a los ochenta años:
akeyasushi kachoo fuuei namu amida
Temprano en la mañana de verano.
componiendo haikus de naturaleza
Namu amida.
- namu amida es un sutra budista que significa “Creo en Amida Buda””.
- Amida es una de las figuras salvadoras más elevadas del budismo japonés, y la fe de Amida se ocupa principalmente de la vida por venir, la vida en el más allá. Amida es también uno de los Cinco Tathagata de la Sabiduría. La mundialmente famosa estatua del Gran Buda (Daibutsu) en Kamakura, de unos 15 metros de altura, es Amida. Para los seguidores de las sectas de la Tierra Pura de Japón (Joodoshuu) Amida ha eclipsado al Buda Histórico como la divinidad más popular en las tradiciones Mahayana de Japón.
El día 8 de Abril se celebra el Memorial de Kyoshi en Japón.
SELECCIÓN DE HAIKUS DE TAKAHAMA KYOSHI
haru-same no ikoh ni omoshi koi-goromo
Lluvia de primavera,
pesadas en un vestidor
las ropas de amor
dotoh iwa wo kamu ware wo kami ka to oboro no yo
Las olas crecientes baten las rocas
como si pensara que soy un dios,
en una noche de luna brumosa
sono naka ni chiisaki kami ya tsubo sumire
En el medio de esto,
un pequeño dios:
una violeta en el jarrón
umi ni irite umare kawaroh oboro-zuki
Sumergiéndose en el mar
la Luna nebulosa-
Podría renacer
kaya goshi ni kusuri niru haha wo kanashimi tsu
Sentir pena por mamá
que está hirviendo a fuego lento
la medicina fuera del mosquitero.
choh-choh no mono kuu oto no shizukasa yo
Una mariposa comiendo algo
un sonido que es
silencio
hebi ana wo dete mireba Chou no tenka nari
Saliendo del agujero
una serpiente ha descubierto
¡Ese Chou se ha convertido en el gobernante de la nación!
mimi tohki ukiyo no koto ya fuyu-gomori
Cansado de oír
cosas mundanas:
confinamiento de invierno
kame naku ya mina orokanaru mura no mono
Una tortuga está llorando:
Toda la gente es
estúpida en el pueblo
bara kurete seisho kashitaru onna kana
Regalando rosas,
una mujer
me prestó una biblia.
haru no yo ya tsukue no ue no hiji-makura
Noche de primavera,
una almohada de codos
sobre el escritorio.
tohyama ni hi no ataritaru kareno kana
Una montaña lejana.
Visto a la luz del sol:
un campo desolado.
utsukushi hito ya kogai no tama-dasuki
Una bella mujer criadora de gusanos.
Las mangas de su kimono
retiradas con una faja blanca.
hada nuide kami suku niwa ya boke no hana
En el jardín, desnuda,
ella peina su cabello;
flores de membrillo japonés.
Uchi-mizu ni shibaraku fuji no shizuku kana
La glorieta regada.
Las flores de la glicinia están goteando
por un corto tiempo.
shohsetsu ni ono-ga tenchi ya roka okoru
Una novela crea
mi propio universo,
el fuego del hogar se caldea.
kyohdai no kokoro kotonaru samusa kana
La diferencia en los corazones
de los hermanos
me hace sentir frío.
horohoro to naki-au ama ya wasabi-zuke
Derramando grandes gotas de lágrimas
las monjas están comiendo juntas,
wasabi-zuke*
*Rábanos picantes japoneses cortados en rodajas y mezclados con sobras de sake.
gyohzui no onna ni horeru karasu kana
Una mujer dándose una baño.
Un cuervo se enamora
¡de ella!
Éste es un haiku ingenioso e irónico en el que no se puede saber si el poeta es serio o está bromeando. Al situar el cuervo negro a su lado, resalta eficazmente la llamativa blancura de la piel de una mujer desnuda.
ai-shitau mura no hi futatsu mushi no koe
Dos luces del pueblo
Anhelando el uno al otro
Canto de insectos
hirune samete sono-mama kumo wo mi-iru nari
Habiendo despertado de una siesta por la tarde
me quedé allí
para observar las nubes
za wo agete koi honomeku ya uta-karuta
Toda la compañía se entusiasma
con el latir de los corazones de los amantes
jugando karuta.
El Uta-garuta es un juego de cartas tradicional de Japón basado en una antología de poemas llamada Hyakunin Isshu (百人一首 «Cien personas, un poema»?), en la que hay cien autores y cada uno de ellos tiene escrito un poema waka. Se juega habitualmente en Año Nuevo. También es llamado habitualmente かるた karuta, que es más corto. Se trata de memorizar las parejas de cartas. Un jugador leerá poemas y otros buscarán su pareja. Memorizando los poemas, antes se podrá coger la pareja que le corresponde a cada poema.
sutare-yuku machi ya kohmori hito ni tobu
Una ciudad en ruinas:
los murciélagos están volando
alrededor de la gente
shuh-sen ya sabishiki kao no ken-fujin
Un abanico otoñal:
el rostro solitario
de una dama astuta.
kimi to ware uso ni horeba ya aki no kure
Tú y yo desearíamos
haber amado las mentiras del otro.
Finales de otoño
akizora wo futatsu ni tateri shii taiju
Dividiendo el cielo otoñal
en dos
un enorme árbol chinquapin.
roh-soh no hone sashi ni kuru yabu-ka kana
Mosquitos rayados
vienen a morder los huesos
¡de un viejo sacerdote!
oyoso tenka ni Kyorai hodo no chiisaki haka ni mairi keri
¡Visité la modesta tumba
de Kyorai, famoso
como poeta haiku en todo el mundo!
inago tobu oto osa ni nite hikuki kana
Las langostas
hacen un ruido parecido
al de un telar manual
ohdera wo tsutsumite wameku konome kana
Envolviendo el gran templo
las yemas de los árboles
¡Chillan!
kusamoyuno daichiniyuruki jishinkana
Un suave terremoto
la hierba brotando
en la tierra
kamakura wo odorokashitaru yokan ari
El frío aún persiste
lo que fue una sorpresa
para Kamakura.
budo no tane haki-dashite koto wo kesshitari
Una semilla de uva
que se escupe,
una decisión tomada
tsuyu no miki shizukani semi no aruki ori
El tronco húmedo.
Una cigarra está caminando
silenciosamente.
kisogawa no imakoso hikare wataridori
Ah, el río Kiso,
brilla en este mismo momento:
aves migratorias.
no wo yaite kaereba tohka haha yasashi
Regresar después de quemar un campo
la luz está encendida:
mamá es dulce en casa
A principios de la primavera, los agricultores eliminan las malas hierbas y queman la hierba seca de los campos para exterminar las plagas de insectos. después de echar una mano, un niño regresa a casa y se encuentra cómodo allí. Los lectores seguramente sentirán el afecto que el niño y su madre comparten.
shuhten no shita ni nogiku no kaben kaku
Bajo el cielo otoñal
un pétalo de un crisantemo silvestre.
Extrañado
doka to toku natsu-obi ni ku wo kake to koso
Con un ruido sordo, ella desató
su ancha faja, diciéndome
escribe un haiku en ella.
Presumiblemente esto describe una escena de un lujoso restaurante en el que una geisha que estaba quizás ligeramente borracha pidió un haiku al poeta y se desabrochó la cintura de su obi para que lo escribiera en él.
ningyoh mada ikite ugokazu kairaishi
Una marioneta no ha estado viva todavía.
Para moverse en el escenario:
un titiritero
atarashiki bohshi kaketari kabi no yado
Ponerse
un sombrero nuevo
en la pensión mohosa.
Durante la temporada de lluvias en japón, es común que el moho crezca en las paredes. En una ocasión en que el poeta se hospedaba en una posada, tuvo que colgar su sombrero recién comprado en la estaca de la pared que notó que tenía parches de moho en desarrollo.
saezuri no taiju no shita no chamise kana
Una tienda de té
bajo el gran árbol
donde los pájaros pían.
manjushage areba kanarazu muchi utare
Los lirios de la araña roja
no pueden
ser azotados.
Estas flores, lirios de araña roja, que pertenecen a la familia de las amarilis, también se llaman higan-bana (la flor de la otra orilla), son rojas o blancas y tienen una apariencia espeluznante. Cuelgan cabeza abajo, como si les hubiera azotado el viento.
harusamu no yorisoi yukeba hito-me aru
Sentir frío en primavera.
Caminamos cerca el uno del otro
y la gente nos mira.
haku-botan to iu to iedomo koh honoka
Aunque se llama
peonía blanca
el rosa es ligeramente perceptible.
tatazumeba ochiba sasayaku hinata kana
Estar quieto por un rato.
Las hojas caídas susurran
en el lugar soleado.
megumu naru taiju no miki ni mimi wo yose
Al tronco de un gran árbol
del que brotan hojas
se acercan los oídos.
ohzora ni nobi katamukeru fuyugi kana
Bajo el cielo abierto
un árbol de invierno se está extendiendo
y se inclina hacia un lado.
Unari otsu hachi ya daichi wo ikari hau
Una abeja zumba y cae:
enfurecida, se arrastra
en la tierra.
nagare-yuku daikon no ha no hayasa kana
La hoja de rábano japonés
se desvanece
¡qué rápido!
metsumureba wakaki ware ari haru no yoi
Cerrando mis ojos
hallo a un joven yo
encontrado en la tarde de primavera.
Kyoshi rememora en este haiku un episodio de su infancia cuando se perdió un día de primavera.
kohbai no beni no kayoeru miki naran
El rosa pálido de las flores rojas de ume*
posiblemente podría atravesar
el tronco del árbol.
*Albaricoque japonés.
yagaku susumu kyohshi no koe no hikuki mama
El estudio nocturno está progresando
con un profesor hablando
en voz baja.
yukata kite shohjo no chibusa takakarazu
Los pechos de una chica
llevando un kimono de algodón
están tumbados suavemente.
tohdai wa hikuku kiribue wa sobadateri
El faro está bajo.
Un silbido en la niebla.
Torres altas.
ohzora ni hane no shirotae todomareri
En el azul
el blanco de un volante*
se queda quieto
*volante: pluma, proyectil utilizado en bádminton.
ki-kazarite Malay onna no hadashi kana
Una mujer malasia
bellamente vestida:
sus pies están descalzos
hito ni haji kami niwa hajizu hatsu-mohde
Visita al santuario al inicio del nuevo año
me hace sentir vergonzoso a los ojos de los demás
no a los ojos de un dios.
rohjin to kodomo to ohshi aki-matsuri
Ancianos y niños pequeños
son tan numerosos
en la fiesta de otoño.
rakkasei kui tsutsu yomu ya Tsumi to Batsu
Comiendo cacahuetes
leo:
“Crimen y Castigo”
akibare ya kokoro yurumeba kumoru beshi
Un hermoso y claro día de otoño:
se nublará
si el espíritu se relaja.
yoroyoroto sao ga noborite kaki hasamu
Una vara se tambalea hacia arriba
para elegir
un caqui.
daikon wo arau te ni mizu shitagaeri
Mis manos lavan un rábano japonés
siguiendo el movimiento
del agua.
kanri no itteki shitaru chikara kana
Una carpa fría
saltó:
su fuerza.
yuki fukaku kokoro hazumite tada aruku
En lo profundo de la nieve
sólo sigo caminando
con el espíritu en alto.
joh-heki ni motarete hana-mi zukare kana
Apoyado en la muralla del castillo
me siento cansado
de ver los cerezos en flor.
yamaguni no choh wo arashi to omowazu ya
¿No crees
que las mariposas de montaña
son ásperas?
aki-zemi mo naki minomushi mo naku nomi zo
Ambas, cigarras de otoño
y gusanos de bolsa
no puede hacer nada más que gritar.
tagayasu ni tsuke yomu ni tsuke tada hitori
Arar y leer
en cualquier caso
estoy solo.
hatsu-choh ku nani-iro to tou ki to kotau
La primera mariposa ha llegado:
preguntado por su color
respondí: amarillo.
waga sei no kyoh no hirune mo ichi-daiji
En mi vida
la siesta de la tarde de hoy también es
un asunto de gran importancia.
amari akaruki tsuki ni ne oshimu onna kana
La luna es demasiado brillante
para que una mujer
se vaya a la cama.
nanigoto mo nowaki ikka no kokoro kana
En todo momento
mi forma de pensar es
que el estallido del otoño pasará.
ranranto hiru no hoshi mie kinoko hae
La estrella del alba
se ve deslumbrante-
crecen hongos
ama totemo riku koso yokere momo no hana
Incluso una mujer buscadora de perlas
admira la tierra
con melocotoneros en flor.
kyoshi hitori ginga to tomoni nishi e yuku
Kyoshi solo,
junto con la galaxia
va hacia el oeste.
naigoto mo shirazu to kotae oi no haru
“No sé nada»
es mi respuesta:
la primavera en mi vejez
homura tomo waga kokoro tomo botan no me
¿Es una llama
o mi corazón?
El brote de la peonía.
entei no nata no kire-aji kare-e tobi
El filo
del hacha del jardinero:
varas secas volando.
shakufu kuru hitori-mushi yori kitanaki ga
Una mujer vino a servir sake:
uno que es más feo
que una polilla tigre.
shin-ryoh ya michi yuku hito no koe futatsu
El fresco de principios de otoño:
dos voces de personas
yendo por el camino.
yoki sumi no yoki hai to naru awaresa yo
Buen carbón volviéndose
buenas cenizas:
¿no es una pena?
futoshitaru koto ni awatete toshi no kure
Agitado
por algo bastante trivial:
los días finales del año.
tajikara-o-no-mikoto tohjoh hatsu-hinode
El Señor Tajikara*
hace su aparición:
amanecer en el día de Año Nuevo
*Una deidad masculina de enorme fuerza física en la mitología sintoísta.
yamabuki no kuki no aosa ni hana imada
El color del tallo de la kerria japonesa
es verde:
las flores no han salido.
muresuzume narukonitomaru asaborake
En un espantapájaros
los gorriones posándose,
luz del amanecer.
erimoto-o naguruyohnari akinokure
Me siento como si
me golpearan en el cuello,
la tarde de otoño
nantonaku atarisabishiki rowo hiraku
Abro el hogar
inexplicablemente solitario
a su alrededor.
arutokiwa tanifukakuoru gebanakana
Flores de gebana,
llevado a lo profundo de un valle
en un momento dado
fumi yomu wa mui no hitotsu ya okigotatsu
Me pregunto si leer un libro
es una forma de matar el tiempo.
Un kotatsu móvil.
*Kotatsu es una mesa de calefacción japonesa.
keibatsuno ishioseoute natsunokana
Alguien llevando
una piedra de castigo en la espalda
el campo de verano.
kimitoware usonihorebaya akinokure
Tú y yo,
¿Qué tal fingir amor?
noche de otoño
shinryohno odoroki gaoni kitarikeri
El fresco de principios de otoño
apareció en la mirada de
una persona sorprendida
bakushokaze tsuyoshi akahontonde kinpiraikaru
Un fuerte viento en la exposición de libros,
un libro de cuentos de tapa roja volteado
exponiendo al héroe Kinpira enfadado
gyohshunno hakamomizohmo chiisakere
La tumba y la estatua
ambas pequeñas,
la primavera que se va.
Escrito a los 39 años. Su cuarta hija había fallecido prematuramente.
kusatsumishi kyohnonoitami yosamekuru
Una lluvia nocturna
de luto por los campos de hoy
donde se recogían las hierbas.
funekishini tsuke bayangini hoshi hitotsu
el barco llegó a la orilla
un sauce allí,
una estrella sobre él.
ishinoueno hokorinifuruya akinoame
sobre el polvo que cubre la piedra,
cae
la lluvia de otoño
tokimono-o kaiketsusuruya haruomatsu
El tiempo resolverá
algunos problemas.
Esperaré la primavera.
amano gawanoshitani tenjitennohto shinkyoshito
Bajo la Vía Láctea,
el emperador Tenji
y su súbdito Kyoshi
shuusenni dakinosete kutsuniseppunsu
En un columpio,
pongo a mi bebé
y beso sus calcetines
giohjino rusunotobiraya osebahiraku
Templo Giohji
la puerta se abre al empujar
cuando no hay nadie allí
benisashite nebienokao-o tsukuroinu
Poniéndose colorete,
ella arregló
su cara helada en el sueño.
konomichio wareragayukuya tanbaiko
Este camino tomaremos,
encontrar
flores de ciruelo
ippenno rakkamiokuru sizukakana
Viendo un pétalo de flor de cerezo
caer.
¡Qué silencio!
sakimichite koboruruhanamo nakarikeri
Flores de cerezo
en plena floración-
no caen pétalos
hina yorimo mihotoke yorimo kawairashi
¡Lindo bebé!
más que
una muñeca Hina o Buda
Las muñecas Hina son muy valiosas y especiales, normalmente el primer juego se las regalan los abuelos a las niñas en su primer Hina Matsuri, que recibe el nombre de hatsuzekku. Otras veces las muñecas son heredades de madres a hijas y las niñas las van decorando cada año con cosas nuevas.
hishoyadono kabeni haritaru kodomonoe
Dibujos escritos por niños
puesto en la pared de
una casa de verano.
tomaritaru haeoukotomo tadanemushi
Simplemente demasiado somnoliento
para apartar
una mosca que se posa
tsuepperin tobikishikunino bonnotsuki
El Zeppelin
voló a mi país_
la luna del festival Bon.
yabunohono ugokuakikaze miteiruka
Podrías quedarte
mirando el viento otoñal,
matorrales en movimiento.
keichitsuno tsuchiouruosu amenaramu
La lluvia empapará
el suelo de
keichitsu
keichitsu’ es un kigo de primavera, que significa el día en que los insectos emergen de la hibernación subterránea; alrededor del 6 de marzo en el calendario solar.
shunchoto iebakanarazu mojio-omou
Hablando de la marea de primavera
me recuerda
el puerto de Moji
hahakigini kagetoiumono arinikeri
Los árboles de escoba
tenían
supuestas sombras
Este haiku parece ser una especie de juego de palabras hecho en asociación con el segundo capítulo de “Genji monogatari” (La historia de Genji) donde aparecen los “hahakigini” («árbol de retama») un arbusto con el que se hacían escobas y que tenía la reputación poética de ser visible desde lejos y desaparecer cuando uno se aproximaba.
tatekakete atarimononaki hamayakana
Una flecha “hamaya”
reposa contra la pared –
nada a su alrededor
La flecha hamaya (破魔矢) es un amuleto japonés en forma de flecha para ‘destruir los demonios’, según su traducción literal. Se vende en los templos sintoístas durante las festividades de Año Nuevo, para alejar la desgracia de quien la compra, atraer la buena suerte y proteger de los malos espíritus durante todo el año.
warenohoshi moeteorunari hoshizukiyo
Noche estrellada y brillante –
luciendo está
mi estrella
dansahno hadakanoueno kawagoromo
Un vestido de piel
simula
una bailarina desnuda
sujibeini soutegekohno sakurakana
Flores de cerezo
brotando hacia abajo
a lo largo del muro sujibei
“sujibei” es una pared techada que rodea un templo o una residencia de samuráis.
kuwaremosu yakumo kyuukyono akinokani
Mordido a propósito
por un mosquito de otoño
de la antigua casa de Yakumo
La expresión «kuwaremosu» puede ser tomada como expresión de la voluntad de Kyoshi de permitir que un mosquito pique, porque el mosquito estaba en la antigua casa de Yakumo (Lafcadio Hearn), que amaba la cultura japonesa y se nacionalizó japonés adoptando el nombre de Yakumo Koizumi.
itechohno onogatamashii outetobu
Una mariposa congelada,
volar persiguiendo
su propio espíritu
kaminimaseba makotouruwashi nachinotaki
Encarnación de dios
¡qué sublimidad!
Cascada Nachi
tohdaiwahikuku mutekiwa sobadateri
El faro está bajo,
prominente es el sonido de
la sirena de niebla.
erimakino kitsunenokaowa betsuniari
La cara de la estola de zorro
descansa
en otra posición
Este haiku da a entender que la persona que llevaba la estola de zorro tenía una cara parecida a la de este animal.
asagao no utsuri nettaigyowashizumu
Una flor de asagao
reflejada,
un pez tropical sumergido.
hasuikeni kamiaraioru onnakana
Una mujer,
lavando su pelo
en el estanque de loto
kawaomiru banananokawawa teyoriochi
La cáscara de plátano
cayó de mi mano,
mirando el río.
tsubakimazu yuretemisetaru harunokaze
Una camelia
tiembla por primera vez al mostrarse –
brisas primaverales
gyobetsuiru mizuofumaete mizusumashi
un escarabajo perinola pisa
en el agua donde
los peces y las tortugas viven.
El escarabajo perinola es un pequeño escarabajo negro en la familia Gyrinidae. Estos escarabajos por lo general viven en la superficie del agua y se denominan así por su tendencia a nadar rápidamente en círculos cuando se asustan.
michi nobeni awa no henro no hakaaware
¡Qué lástima!!
en el borde del camino,
una tumba de peregrino “Awa”
Awa Kokubunji se encuentra en la localidad de Tokushima y es el templo número 15 de los 88 que visitan los peregrinos en su viaje por la ruta Shikoku Henro, una ruta de 1200 kms.
tatoureba komanohajikeru gotokunari
Como dos peonzas
nosotros salimos despedidos
al más ligero roce.
Kawahigashi Hekigotou, gran amigo de Kyoshi, había fallecido poco antes. A pesar de su gran amistad, los dos poetas chocaban a menudo debido a sus distintas maneras de pensar, de ahí que Kyoshi utilice este kigo de Año Nuevo (peonza) y el lance del juego para homenajear a su amigo.
inazumao fumitehadashino onnakana
Pisando un relámpago
una mujer
descalza.
nanigashi ni funshite tsuki ni arukiori
Bajo la luna,
caminando con un disfraz
de cierta persona.
daikanno hokori nogotoku hitoshi nuru
La gente muere
como polvo
de pleno invierno
yamagawani hitori kamiarau kamizoshiru
Dios sabe –
En un arroyo de montaña
una mujer sola lavándose el pelo.
tsurumodoki nasakewamotsure yasukikana
La compasión
se enreda fácilmente-
celastrus.
Celastrus, comúnmente conocido como enredadera de mesa, árbol de mesa o agridulce, es un género de la familia de las Celastraceae que comprende alrededor de 30-40 especies de arbustos y vides. Tienen una amplia distribución en Asia Oriental, Australasia, África y América.
haitataki tenimochiwareni taishinashi
Con un matamoscas
en mi mano
No tengo grandes ambiciones.
kumoniare amiokakeneba naranukana
Nacida como araña
no le queda más remedio que tejer
su teleraña.
ohzakura korenikasizuki ohtsubaki
Un gran cerezo
a su lado
una gran camelia
hitori kunosuikoh-o-shite osokihio
Solo,
componiendo haikus-
alargando los días de primavera
shiraumeni sumifuritarito iunomizo
Flores de ume,
simplemente digo
viví para ser venerablemente viejo.
Fuentes consultadas para confeccionar este artículo
- One hundred and one exceptional haiku poems by Kyoshi Takahama, translated by Hiromoto Katsuya, 2007©
- The Quiet Joy of Peace and Harmony: Kyoshi Takahama’s Life and Literature. Hiromoto Katsuya ©
- http://knt73.blog.enjoy.jp/blog/ Satoshi Kinoshita ©
- One hundred haiku of Kyoshi, by Inahata Teiko ©
Leticia Sicilia, 2019 ©