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El hilo de la araña

De acuerdo con el calendario lunar vigente en Japón hasta la era Meiji (1868-1912), el verano comenzaba al inicio de mayo y terminaba en los primeros días de agosto, por lo que abarcaba un periodo con fenómenos meteorológicos diversos: el clima agradable de mayo, las lluvias interminables de junio y el calor agobiante de finales de julio. Bajo el calendario gregoriano, en cambio, el verano inicia en medio del monzón e integra los meses más cálidos del año: julio, agosto y septiembre. Pese al desfase de mes y medio entre ambos sistemas, dicha estación siempre se ha asociado con el verdor exuberante, el calor, la humedad y la descomposición, aspectos que favorecen la proliferación de todo tipo de invertebrados terrestres. Por este motivo, para este mes de julio, he reunido poemas sobre uno de los predadores más conocidos de esta categoría de animales pequeños, las arañas, de las que existe una gran variedad en el archipiélago. Aunque para algunos de nosotros es muy claro lo que es una araña, cabe recordar que no son insectos, sino arácnidos[1], con ocho patas, cuerpos segmentados en dos (cabeza y abdomen), ocho ojos y la capacidad de producir hilos de seda.

Los nombres japoneses para estos animalillos son sasagani, que significa “cangrejos del bambú”, y kumo, escribible como 蜘蛛 o simplemente 蜘. Ambos se consideran como palabras estacionales del verano, lo mismo que las palabras asociadas para telaraña, kumo no su 蜘蛛の巣 y kumo no i 蜘蛛の囲, ovillo de huevos, kumo no taiko 蜘蛛の太鼓, o crías de araña, kumo no ko 蜘蛛の子. Esta asociación estacional se debe a la proliferación de las especies que viven en exteriores, pues la mayoría muere antes de terminar el otoño, mientras que otras se ocultan para invernar. Las arañas, por su parte, son escasas en la poesía clásica, pero, cuando llegan a aparecer, suele ser la aparente fragilidad de sus telas lo que cautiva la atención, pues recuerda lo precario de toda empresa humana. En el japonés cotidiano, las arañas pueden incluirse en la categoría de mushi 虫, más o menos equivalente al español “bicho” y usado para toda clase de animales terrestres pequeños, tanto invertebrados, como vertebrados. Sin embargo, en la poesía clásica, mushi 虫 se utiliza exclusivamente para referirse a los insectos sonoros de las noches del otoño lunar, es decir, grillos y saltamontes.

Las más llamativas de Japón son las conocidas como “arañas dama” o jorôgumo 女郎蜘蛛, denominación usada originalmente para la Trichonephila clavata, de cabeza gris, abdomen alargado con patrones verdes y amarillos en el dorso, negros, amarillos y rojos en el vientre y patas negras con articulaciones amarillas.

Triconephila clavata, Tsukuba, 14/10/2019

 Sin embargo, en la actualidad, este apelativo puede usarse también para varias especies del género Argiope, de abdómenes más redondeados con franjas transversales claras y oscuras. Éstas reciben también el nombre de “arañas doradas” o koganegumo 黄金蜘蛛. Además, existen las llamadas “arañas dama gigantes” u ôjorôgumo 大女郎蜘蛛, nombre que puede ser usado para la Nephila pilipes o para la Nephila maculata, que pueden superar los 20 cm de longitud y cuyos abdómenes son negros con intrincados patrones amarillos. Todas estas arañas se caracterizan por construir grandes redes circulares entre la vegetación. En ocasiones, resulta difícil pasar entre la maleza de los bosques y parques sin llevarse varias de sus telarañas de por medio. Por otra parte, también vale mencionar, puesto que aparecen en un par de poemas, que hay arañas acuáticas y semiacuáticas: las primeras viven bajo el agua con la ayuda de burbujas que envuelven sus cuerpos y nidos, mientras que las segundas cazan en las inmediaciones o en la superficie, usando sus hilos para moverse sin el riesgo de caer y ahogarse. 

Nephila sp., Tsukuba, 26/09/2019

 

Argioppe bruennichi, Tsukuba, 8/10/2019

 

Triconephila clavata, Tsukuba, 1/10/2019

1.

Henjô 遍昭 (816-890), director de los Archivos Imperiales, monje de la Escuela de Tiāntái (Tendaishū 天台宗)[2], Rector Monacal (Sôjô 僧正) y uno de los Seis Inmortales de la Poesía (Rokkasen 六歌仙).

さゝがにの空にすがくもおなじことまたき宿にもいく世かはふる
Sasagani no sora ni sugaku mo onaji koto mataki yado ni mo ikuyo ka hôru

Justo es lo mismo
que con la telaraña
fija al vacío:
¿se vivirá hasta cuándo
con la morada intacta?

2.

Anónimo con el número 1296 de la Segunda antología de poesía japonesa (Gosenwakashū 後撰和歌集; 951). Fue enviado a un hombre con el que había una relación difícil por medio de sus hermanos.

ささがにのそらに巣かける糸よりも心細しやたえぬとおもへば
Sasagani no sora ni sugakeru ito yori mo kokorobososhi ya taenu to omoeba

¡Es más precaria
que el hilo de la red
de alguna araña
que se fija al vacío!
Al pensar que se esfuma…

3.

Anónimo con el número 1297 de la Segunda antología de poesía japonesa (Gosenwakashū 後撰和歌集; 951). Se trata de la respuesta al anterior.

風ふけばたえぬと見ゆる蜘蛛の囲も又かきつかでやむとやはきく
Kaze fukeba taenu to miyuru kumo no i mo mata kaki tsugade yamu to yawa kiku

Al soplar el viento,
puede verse esfumarse
la telaraña…
¡Oigo también que cesa
al ya no sostenerse!

4.

El Segundo Emperador del Claustro de Toba (Go-Toba-in 後鳥羽院) (1180-1239), poeta prolífico, crítico literario, editor de la Nueva antología de la poesía japonesa antigua y moderna (Shinkokinwakashū 新古今和歌集), persecutor de la Escuela de la Tierra Pura (Jôdoshū 浄土宗) y líder del intento de restauración del gobierno cortesano de 1221. Éste es el poema número 32 de La primera ronda de cien poemas de la era Shôji (Shôji shodo hyakushu 正治初度百首).

むら雲はなほ鳴る神のこゑながら夕日にまがふささがにの露
Murakumo wa / nao naru kami no / koe nagara / yūhi ni magau / sasagani no tsuyu

Ese celaje,
mientras suena la voz
del dios del trueno,
se confunde al ocaso
con rocío de araña.

Nephila sp., Tsukuba, 24/09/2019

5.

Chiyo 千代 (1703-1775), poetisa de haikai discípula de Kagami Shikô 各務支考, artesana montadora de rollos y monja de la Escuela de la Verdad de la Tierra Pura (Jôdoshinshū 浄土真宗).

蘋を岸に繋ぐや蜘蛛の糸
Ukikusa o kishi ni tsunagu ya kumo no ito

¡Atan lentejas de agua
en la ribera!
Hilos de araña.

6.

Murakami Kijô 村上鬼城 (1865-1938), asistente legal y haikuísta discípulo de Masaoka Shiki 正岡子規.

浮草や蜘蛛渡りゐて水平ら
Ukikusa ya / kumo watari ite / suiheira

¡Lentejas de agua!
Va cruzando la araña
horizontalmente.

7.

Natsume Sôseki 夏目漱石 (1867-1916), especialista en literatura inglesa, novelista, poeta, profesor de inglés, haikuísta y crítico literario.

蓮の葉に蜘蛛下りけり香を焚く
Hasu no ha ni / kumo kudarikeri / kori o taku

Ha descendido
una araña en el loto.
Quemo el incienso.

8.

Takahama Kyoshi 高浜虚子 (1874-1959), haikuísta discípulo de Masaoka Shiki 正岡子規, editor a cargo de la revista Hototogisu, novelista y dramaturgo.

客人に下れる蜘や草の宿
Marôto ni kudareru kumo ya kusa no yado

¡Ay, una araña
descendió sobre el cliente!
Choza de hierba.

葉を抱く蜘の脚のみ見えてをり
Ha o idaku kumo no ashi nomi miete ori

Asida a la hoja,
las patas de la araña
se pueden ver.

蜘蛛虫を抱き四脚踏み延ばし
Kumo mushi o idaki yotsuashi fuminobashi

La araña un bicho
ase con cuatro patas
que estira y dobla.

蜘掃けば太鼓落して悲しけれ
Kumo hakeba taiko otoshite kanashikere

Soltó su ovillo
la araña al ser barrida:
¡qué triste fue eso!

9.

Terada Torahiko 寺田寅彦 (1878-1935), físico, profesor de la Universidad Imperial de Tokio, miembro del Instituto de Investigaciones Físicas y Químicas (Rikagaku Kenkyūsho 理化学研究所), miembro de la Academia Imperial (Teikoku Gakushiin 帝国学士院) y haikuísta discípulo de Natsume Sôseki 夏目漱石.

蜘蛛の囲に夢の白玉明け易き
Kumo no i ni yume no shiratama ake yasuki

En la telaraña,
perlas blancas de los sueños
Pronto amanecer.

Akeyasuki 明け易き, traducido por “pronto amanecer”, es una palabra propia del verano, pues hace referencia a la brevedad de las noches de dicha estación en contraste con las de invierno.

Nephila pilipes, Tsukuba, 25/09/2019

10.

Taneda Santôka 種田山頭火 (1882-1940), haikuísta de estilo libre discípulo de Ogihara Seisensui 荻原井泉水, caminante y monje de la Escuela Cáodòng (Sôtôshū 曹洞宗).

若葉から若葉へゆふべの蜘蛛はいそがしく
Wakaba kara wakaba e yūbe no kumo wa isogashiku

De unos retoños a otros,
ocupada la araña al ocaso…

大蜘蛛しづかに網張れり朝焼の中
Ôgumo shizuka ni ami hareri asayake no naka

Entre los colores del alba,
instaló con calma su red
una arañota.

蜘蛛は網張る、私は私を肯定する
Kumo wa ami haru, watashi wa watashi o kôtei suru

La araña instala su red;
yo me afirmo a mí mismo.

11.

Mizuhara Shūôshi 水原秋桜子 (1892-1981), médico obstetra con doctorado a cargo de la Oficina Médica del Ministerio de la Casa Imperial, profesor de ginecología en el Colegio Médico de Shôwa (Shôwa Igaku Senmongakkô 昭和医学専門学校), haikuísta discípulo de Takahama Kyôshi 高浜虚子 y de Matsune Tôyôjô 松根東洋城, luego adalid del haiku de vanguardia y editor.

妖しさは切りはらひても蜘蛛の糸
Ayashisa wa kiriharaite mo kumo no ito

Lo encantador:
hilos de araña
a pesar del desmonte.

12.

Nakamura Teijo 中村汀女 (1900-1988), haikuísta del círculo de la revista Hototogisu.

蜘蛛の圍や朝日射しきて大輪に
Kumo no i ya asahi sashi kite tairin ni

¡La telaraña!
El sol del alba alumbra
las grandes flores.

13.

Nagai Tatsuo 永井龍男 (1904-1990), novelista, cuentista, ensayista, haikuísta, editor, director del Museo Literario de Kamakura y miembro de los comités seleccionadores de los premios Akutagawa y Naoki.

女郎蜘蛛径を許さず夏あざみ
Jorôgumo michi o yurusazu natsu azami

La araña dama
no me permite el paso.
Cardos de estío.

14.

Nomiyama Asuka 野見山朱鳥 (1917-1970), haikuísta discípulo de Takahama Kyoshi 高浜虚子 y editor.

松蝉の響ける糸を蜘蛛渡る
Matsuzemi no hibikeru ito o kumo wataru

Reverberan
las cigarras de los pinos.
Cruza su hilo una araña.

Las cigarras de los pinos (Terpnosia vacua) son una especie que emerge entre mayo y junio, antes que la mayoría de estos insectos. Como su nombre indica, habitan arboledas de pinos.

15.

Chiyoda Kuzuhiko 千代田葛彦 (1917-2003), haikuísta discípulo de Mizuhara Shūôshi 水原秋桜子.

露をもて日を荘厳す蜘蛛の国
Tsuyu o mote hi o shôgon su kumo no kuni

País de arañas
que el sol adornan
al retener rocío.

16.

Īda Ryūta 飯田龍太 (1920-2007), haikuísta hijo de Īda Dakotsu 飯田蛇笏, periodista y editor.

女郎蜘蛛十方に揺れ産後の身
Jorôgumo jūhô ni yure sango no mi

La araña dama
vibra en todas direcciones:
cuerpo en posparto.

17.

Ôshima Tamirô 大島民郎 (n. 1921), haikuísta del grupo de la revista Kunugi 橡.

しぐれ聴く聖観音へ蜘蛛の糸
Shigure kiku Shô Kannon e kumo no ito

Oigo la llovizna.
El hilo de una araña
hacia Kannon.

 

El poema se refiere específicamente a una imagen de Āryāvalokiteśvara o Shô Kannon 聖観音, la forma humana del bodhisattva, que contrasta con las de mil brazos, once rostros, aspecto feroz, etc. Por su parte, shigure しぐれ, aquí traducido por llovizna, es una palabra propia del inicio del invierno del calendario lunar, es decir, de noviembre.

18.

Ôkubo Hakuson 大久保白村 (n. 1930) vicepresidente de la Asociación Japonesa de Haiku Tradicional (Nihon Dentô Haiku Kyôkai 日本伝統俳句協会) y ex presidente de la Federación de Haiku del Área Metropolitana de Tokio (Tôkyôto Haiku Renmei 東京都俳句連盟).

山雨過ぎ網を繕ふ女郎蜘蛛
San’u sugi ami o ukurou jorôgumo

Pasa la lluvia en los montes
y una araña dama
remienda su red.

19.

Yukawa Miyabi 湯川雅 (n. 1946), haikuísta del círculo de la revista Hototogisu y miembro (mujer) de la Asociación Japonesa de Haiku Tradicional (Nihon Dentô Haiku Kyôkai 日本伝統俳句協会).

蜘蛛の囲に大平洋の朝日掛く
Kumo no i ni Taiheiyô no asahi kaku

De la telaraña,
cuelga el sol matutino
del Pacífico.

20.

Sakai Tatsu 坂井建 (n. 1947), burócrata del Ministerio de Finanzas, director del Colegio Nacional de Recaudación, ejecutivo de la Corporación Pública de Construcción de Vías Ferroviarias de Japón (Nihon Tetsudô Kensetsu Kôdan 日本鉄道建設公団) y haikuísta.

若蜘蛛の脚飴色に透き通り
Waka kumo no / ashi ameiro ni / sukitôri

Se transparentan
las patas color ámbar
de la arañita.

21.

Sasaki Rokka 佐々木六戈 (n. 1955), haikuísta y poeta de tanka.

女郎蜘蛛外へ外へと荒き絲
Jorôgumo soto e soto e to araki ito

La araña dama:
hacia afuera, hacia afuera
con su tosco hilo…

22.

Igusa Keiko 藺草慶子 (n. 1959), haikuísta discípula de Yamaguchi Seison 山口青邨, secretaria ejecutiva de la Asociación de Haikuístas (Haijin Kyokai 俳人協会) y miembro de la Asociación de Literatos Japoneses (Nihon Bungeika Kyokai 日本文芸家協会).

するするとこの月明を蜘蛛上る
Surusuru to kono getsumei o kumo noboru

Con suavidad
la araña sube
por la luz de la luna.

23.

Amano Hiroko 天野博子.

鬼蜘蛛の囲も借り足長ぐもの網
Onigumo no i mo kari ashinagagumo no ami

Hasta la tela de la araña ogro
tomó prestada:
la red de la araña patas largas.

La araña ogro u onigumo 鬼蜘蛛 (Araneus ventricosus) es una especie de color café y abdomen redondo que teje redes circulares entre la vegetación, en cuyo centro espera la llegada de presas. Por su parte, la araña patas largas o ashinagagumo 脚長蜘蛛 (Tetragnatha praedonia) es una especie de abdomen cilíndrico y patas delanteras que duplican la longitud del cuerpo, la cual suele ocultarse en el dorso de los tallos.

Araneus ventricosus, Tsukuba, 17/10/2019

 

Nephila pilipes, Tsukuba, 24/09/2019

[1] Tanto los insectos, como los arácnidos, son clases dentro del filo taxonómico de los artrópodos, nombre que indica que sus miembros tienen patas articuladas. Los insectos, en contraste con los arácnidos, tienen seis patas, un cuerpo segmentado en tres (cabeza, tórax y abdomen) y un número variable de ojos que depende de su linaje evolutivo.

[2] En publicaciones anteriores, he traducido Tendai 天台 por “Terraza Celestial”, que es el significado de ese nombre, con que se conoce la montaña sagrada en que la escuela tiene su base en China. Sin embargo, después de reflexionarlo, he llegado a la conclusión de que lo apropiado sería usar como traducción la lectura en pinyin para mostrar la continuidad entre la escuela japonesa y su contraparte continental, además de mantener la referencia geográfica clara. El mismo procedimiento se usará para traducir los nombres de otras escuelas budistas de origen chino.

Julio 2022

Ballenas

Llegó junio y otra vez la grandiosidad del paisaje  con  la presencia de la  ballena franca austral.

Siguiendo las páginas de mi memoria, se hacen presentes ¡¡tantos instantes!! Puedo decir que ha variado la cantidad  y la época del año en que aparecen. Es un verdadero espectáculo de la naturaleza verlas.

Explorando en la caleta, la Bajada de la Osa, el Paraje de la Lobería (espacios ubicados al norte de la provincia de Santa Cruz)* en suaves amaneceres; en soleados o nublados de mediodías; en fríos atardeceres.

En momentos en que no las esperas, aparecen:

– Rumbo  hacia la Península de Valdez (en la Provincia del Chubut) que es el lugar elegido para su reproducción.

– Jugueteando con ballenatos, en otros momentos.

– Como así… de repente, se muestran emergiendo y al caer es inverosímil el estruendo que producen.

– Con sus movimientos de la cola o las aletas asomando, los círculos que dibujan entre dos o a veces más individuos. Imagino lo que debe ser acercarse con una embarcación.

*Playa Bajada de la Osa con sus metros de largo, se encuentra al sur de Playa la Lobería y al norte de Playa La Encajada en el norte santacruceño, más precisamente en la Cuenca del Golfo San Jorge.

La lobería.
Los ruidos del movimiento
de ballenas francas

 

Sigo la lectura de un artículo de la National geographic  y me parece oportuno transmitir:

“…Las ballenas expulsan aire (no agua) por los espiráculos

Según explica Garrard, cuando una ballena sale a la superficie después de contener la respiración, el ruido que se oye “es su exhalación” antes de inhalar y volver a sumergirse. En los dibujos animados, vemos que esto suele representarse como un chorro de agua, pero “lo que realmente vemos es el aliento de la ballena”. Cuando el aire caliente de los pulmones de la ballena se encuentra con el aire frío del exterior, se condensa en una nube, como lo que sucede cuando exhalamos en un día frío. Esta nube también contiene mucosidad y las gotas de agua de mar que había sobre el espiráculo…”

https://www.nationalgeographicla.com/animales/2021/06/ballenas-la-ciencia-explica-que-no-expulsan-agua-por-los-espiraculos-y-aclara-otras-ideas-erroneas-sobre-estos-animales#:~:text=Las%20ballenas%20expulsan%20aire%20(no,inhalar%20y%20volver%20a%20sumergirse.

Aún de lejos…
ver las callosidades
de la ballena

 

33 vistas del Monte Tsukuba

A mis amigos de aquel rincón de Ibaraki

Cuando uno se dedica a la literatura japonesa, el haiku es algo que siempre sale al encuentro. Sin embargo, mi tesis de maestría fue sobre una obra narrativa del siglo XVII y mi interés estaba más bien en el tanka clásico, que expresa emociones e ideas de forma elegante e indirecta. En ese contexto, mi primer acercamiento serio con este tipo de poesía se dio a raíz de una plática que tuve con Yaxkin Melchy mientras regresábamos de visitar, también por vez primera, el jardín de ciruelos del Monte Tsukuba. Ante la pregunta de cuál era mi haiku para aquella ocasión, no supe qué responder. Después, pensando en no volverme a quedar sin el verso apropiado, me di cuenta de que muchas de las plantas y animales que había estado documentando durante mi estancia en aquel lugar no aparecían en tankas ni en El relato de un Genji, sino sólo en el haiku, más abierto a preservar la simpleza de lo cotidiano y no sólo retomar los elementos cargados de bagaje literario o simbólico.

Quizá no haya sido un hecho fortuito, sino el resultado de un enlace kármico el que sucediera así, pues el Monte Tsukuba es la montaña de la poesía, opacada sólo en el par de siglos recientes por el Fuji, ubicado al otro extremo de la planicie de Musashi (o de la zona metropolitana de Tokio). El primer poema dialógico dentro de los mitos Kiki 記紀, presentado en el apartado uno, menciona dicho topónimo, por lo que se convirtió en signo de las secuencias poéticas clásicas, es decir, del renga 連歌. Así, «vía de Tsukuba» (Tsukuba no michi 筑波の道) fue sinónimo de esa práctica de la que surgió el haikai y, siglos más tarde, el haiku. Bashô, después de recordar esa historia, escribió en el prefacio del Peregrinaje a Kashima (Kashima mairi 鹿島詣; 1687) que, ante ese par de cumbres que recordaba a las famosas Montañas del Ermitaño (Lúshān 廬山), en China, con su pico llamado Par de Espadas (Shuāngjiàn 双剣): “no se puede estar sin poemas [tanka], no se puede pasar de largo sin versos [haikai]. De verdad, parece que ha sido una montaña que sólo se puede amar” (waka naku ba aru bekarazu, ku naku ba sugu bekarazu. Makoto ni ai subeki yama no sugata narikerashi 和歌なくばあるべからず、句なくばすぐべからず。まことに愛すべき山のすがたなりけらし).

En la actualidad, «vía de Tsukuba» (Tsukuba no michi つくばの道) es el nombre dado al camino principal que conduce al Santuario del Monte Tsukuba (Tsukubasan Jinja 筑波山神社), espacio religioso formado en 1875 con la destrucción del Templo de la Meditación Media (Chūzenji 中禅寺), que había estado ahí desde inicios del siglo IX. Algunos elementos de su compleja historia religiosa son relevantes para la poesía aquí compilada, así que haré un breve resumen. Desde tiempos antiguos, como se ve en los poemas de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759), el Monte Tsukuba, con sus dos cumbres, fue visto como la unión de una deidad masculina y otra femenina, de la cual emanaba la fertilidad de los valles circundantes. Esos dioses fueron identificados con Izanagi 伊弉諾 e Izanami 伊弉冊 que, de acuerdo con los mitos Kiki, eran los creadores del archipiélago japonés y los ancestros de casi todos los dioses locales. En la versión transmitida por Los orígenes kármicos del Monte Tsukuba (Tsukubasan engi 筑波山縁起), un texto que se cree de inicios del siglo XIX, el sitio de la montaña sería la isla Onokoro, lugar a partir del cual esa pareja divina engendró las islas, los ríos, las montañas y la miríada de dioses que los pueblan. Ésta es la razón por la que Masaoka Shiki 政岡子規 dice en su tanka que Tsukuba es «la primavera del Origen del Sol» (Hi no moto no haru 日の本の春) y ésta es la historia que cuenta la serie de haikus mitológicos de Mizuhara Shūôshi 水原秋桜子. No olvidemos, sin embargo, que, durante casi un milenio, ambas cumbres fueron vistas como avatares cuyas fuentes eran dos formas tántricas del bodhisattva Avalokiteśvara (Kannon 観音), unidas al Deva del Gozo (Kangiten 歓喜天; Gaņeśa) en el caso masculino, y a la Devī del Discurso y del Ingenio (Benzaiten 弁財天, Sarasvati), en el femenino. Quizá es la confluencia de atributos de esas deidades lo que hizo de la montaña, también conocida como las Cumbres Púrpuras (Shihô 紫峰), una fuente de inspiración a través de los siglos.

1.

Este canto dialógico, presentado tanto en El registro de las cosas antiguas (Kojiki 古事記; 712), como en las Crónicas de Japón (Nihonshoki 日本書紀; 720) en las respectivas secciones dedicadas al mítico Emperador que Recorría los Paisajes (Keikô 景行) es considerado el primer sedôka 旋頭歌, poema compuesto por dos tercetos complementarios de 5-7-7 sonidos. La primera mitad es atribuida al Príncipe Ousu 小碓, mejor conocido como el Guerrero de Yamato (Yamato-Takeru 倭建 o 日本武), personaje mítico que habría derrotado a varios pueblos que no se sometían a la autoridad de su padre. Su segmento habría sido una pregunta a sus acompañantes cuando regresaban de una campaña en el noreste de Honshū. La segunda parte habría sido la respuesta de un portador de antorcha ante el silencio de los sirvientes del príncipe.

珥比麼利菟玖波塢須擬氐異玖用伽禰菟流
Niibari / Tsukuba o sugite / ikuyo ka netsuru

¿Cuánto he dormido
desde que atrás dejamos
Niibari y Tsukuba?

伽餓奈倍氐用珥波虛々能用比珥波苔塢伽塢
Kaga nabete / yo ni wa kokonoyo / hi niwa tôka o

Siguiéndose los días,
noches, nueve van ya
y días, diez.

2.

Takahashi no Mushimaro 高橋虫麻呂 (siglo VIII), funcionario en Hitachi y poeta. Éste es el poema 1757 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759), compuesto al subir el Monte Tsukuba.

草枕客之憂乎名草漏事毛有哉跡筑波嶺尓登而見者尾花落師付之田井尓鴈泣毛寒来喧奴新治乃鳥羽能淡海毛秋風尓白浪立奴筑波嶺乃吉久乎見者長氣尓念積来之憂者息沼

Kusamakura / tabi no uree o / nagusamoru / koto mo ari ya to / Tsukubane ni / noborite mireba / obana chiru / Shizuku no tai ni / kari ga ne mo / samuku ki nakinu / Niihari no / Toba no awaumi mo / akikaze ni / shiranami tachinu / Tsukubane no / yokeku o mireba / nagaki hi ni / omoitsumi koshi / uree wa yaminu

¡Que alguna cosa
las penas aliviara
de un viaje en que la hierba
sirve de almohada!

Y, al subir y observar,
desde el Monte Tsukuba:

voces de gansos
que van graznando
sobre arrozales
del gélido Shizuku
en que se esparcen
penachos de los pastos;

y aquel pantano
de Toba en el Niibari,
donde el viento de otoño
levanta blancas olas.

Viendo esas maravillas
desde el Monte Tsukuba,
desaparecen
todas las penas
acumuladas
después de un largo día.

Éste es el 1758 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759) y se trata del poema opuesto (hanka 反歌) al anterior.

筑波嶺乃須蘇廻乃田井尓秋田苅妹許将遺黄葉手折奈

Tsukubane no / susomi no tai ni / akita karu / imo gari yaramu / momiji teorana

Voy a cortar
hojas ocres para ella
que anda en la siega
otoñal de arrozales
a los pies del Tsukuba.

Éste es el poema 1759 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759), compuesto el día en que se sube al Monte Tsukuba para realizar el festival del Kagai 嬥謌.

鷲住筑波乃山之裳羽服津乃其津乃上尓率而 未通女牡士之徃集加賀布嬥歌尓他妻尓吾毛交牟吾妻尓他毛言問此山乎牛掃神之従来不禁行事叙今日耳者目串毛勿見事毛咎莫

Washi no sumu / Tsukuba no yama no / Mohakitsu no / sono tsu no ue ni / adomoite / otome otoko no / ikitsudoi / kagau kagai ni / hitozuma ni / a mo majiwaramu / waga tsuma ni / hito no kototoe / kono yama o / ushiwaku kami no / mukashi yori / isamenuwaza zo / kyô nomi wa / megushi mo na mi so / koto mo togamu na

Sobre aquel puerto
de Mohakitsu
en el Monte Tsukuba
donde habitan las águilas,
somos llevados.
Doncellas y mancebos
se irán reuniendo
y, en medio de la fiesta,
con una esposa ajena
también podría unirme
y mi mujer, de otro hombre,
puede tener propuesta.
Los dioses que gobiernan
esta montaña
desde tiempos remotos
lo permiten así.
Sólo por hoy,
¡ni notes la belleza,
ni reproches los actos!

 

Éste es el 1760 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万 集; c. 759) y se trata del poema opuesto (hanka 反歌) al anterior.

男神尓雲立登斯具礼零沾通友吾将反哉
Onokami ni / kumodachi nobori / shigure furi / nuretôru to mo / ware karerame ya

Sobre el dios macho,
se alzan súbitas nubes
y cae llovizna.
¿Acaso me iré así
totalmente mojado?

3.
Tajihi no Mahito Kunihito 丹比真人国人 (siglo VIII), funcionario del Ministerio de Asuntos Populares, gobernador de Izumo y de Tôtômi, exiliado a Izu en el 757 por su implicación en la conspiración de Tachibana no Naramaro 橘奈良麻呂. Éste es el poema 382 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759), compuesto al subir el Monte Tsukuba.

鷄之鳴東國尓高山者佐波尓雖有朋神之貴山乃儕立乃見杲石山跡神代従人之言嗣國見為築羽乃山矣冬木成時敷時跡不見而徃者益而戀石見雪消為山道尚矣名積叙吾来煎

Tori ga naku / azuma no kuni ni / takayama wa / sawa ni aredomo / futa kami no / tôtoki yama no / nami tachi no / mi ga hoshi yama to / kamiyo yori / hito no iitsugi / kunimi suru / Tsukuba no yama o / fuyugomori / tokijiki toki to / mizute ikaba / mashite koishimi / yukige suru / yamamichi sura o / nazumi zo waga keru

Aunque haya muchos
montes muy altos
en las tierras de oriente
en que cantan los gallos,
habla la gente
desde la era divina
de esos montes sagrados,
dos deidades en fila,
cuyo encuentro deseaba.
Al ir sin observar
que el monte de Tsukuba
de donde el territorio
de vista se domina
fuera de tiempo
aún se hallaba
sumido en el invierno,
con dificultad vengo
por sendas en deshielo
aumentado mi aprecio.

Éste es el poema 383 de la Antología de la miríada de hojas (Man’yôshū 万葉集; c. 759) y se trata del poema opuesto (hanka 反歌) al anterior.

築羽根矣卌耳見乍有金手雪消乃道矣名積来有鴨
Tsukubane o / yoso nomi mitsutsu / ari kanete / yukige no michi o / nazumi kuru kamo

Tras haber visto
al tal Monte Tsukuba,
sólo de lejos,
por sendas en deshielo
con pesar quizá llegue.

4.
Poema anónimo con el número 1095 de la Antología de la poesía japonesa antigua y moderna (Kokinwakashū 古今和歌集). Es presentado como «La canción de Hitachi» (Hitachi uta ひたちうた).

筑波嶺のこのもかのもに陰はあれど君がみかげにますかげはなし
Tsukubane no / kono mo kano mo ni / kage wa aredo / kimi ga mikage ni / masu kage wa nashi

Aunque haya encantos
en el Monte Tsukuba
por todas partes,
no hay una que supere
la de vuestra merced.

La palabra kage 陰 puede significar sombra, pero también protección o benevolencia de algún ser superior. Es homófona con kage 影, que significa silueta o imagen. Mientras tanto, mikage みかげ es una forma honorífica de cualquiera de las anteriores, especialmente usada para las imágenes de dioses, budas y aristócratas. De acuerdo con el poema, los bellos paisajes del Monte Tsukuba no se comparaban con la persona a quien iba dirigida o quizá su benevolencia superaba la sombra de aquella montaña.

5.
El Emperador del Claustro Repleto de Sol (Yôzeiin 陽成院; 869-949). Éste es el poema 776 de la Segunda antología de poesía japonesa (Gosenwakashū 後撰和歌集; 951).

筑波嶺の峰より落つるみなの河恋ぞつもりて淵となりける
Tsukubane no / mine yori otsuru / Minanogawa / koi zo tsumorite / fuchi to narikeru

El Río Minano
cae desde las cimas
del Monte Tsukuba:
así el amor se acopia
volviéndose hondonadas.

El nombre de este río que desciende del Monte Tsukuba se escribe con los caracteres para hombre y para mujer, Minano 男女, por lo que se entiende como símbolo del amor heterosexual y emblema de la fertilidad que prodiga la montaña. Actualmente, es sólo un vestigio de aquel pasado, pero su curso sigue pasando junto a santuarios que recuerdan su importancia religiosa.

6.
Nôin 能因 (988-1051), monje, poeta viajero y esteta. Éste es el poema número 164 de la Antología de poesía japonesa de las flores del lenguaje (Shikawakashū 詞花和歌集; 1152).

君が世はしら雲かかる筑波嶺のみねのつづきの海となるまで
Kimi ga yo wa / shirakumo kakaru / Tsukubane no / mine no tsuzuki no / umi to naru made

Vuestro reinado
hasta donde los montes
se vuelven mar
más allá del Tsukuba
lleno de blancas nubes.

Éste es el poema con el número 1303 de la Nueva antología imperial de poesía japonesa (Shinchokusenwakashū 新勅撰和歌集; 1234), acompañado por una introducción que dice que fue compuesto en Hitachi.

よそにのみおもひおこせしつくばねのみねの白雲けふ見つるかな
Yoso ni nomi / omoiokoseshi / Tsukubane no / mine no shirakumo / kyô mitsuru kana

Me hace pensar
tan sólo en otras cosas:
hoy pude ver
las nubes en las cimas
del tal Monte Tsukuba.

7.
Hattori Ransetsu 服部嵐雪 (1654-1707), samurái al servicio del señor feudal de Hitachi y poeta de haikai discípulo de Bashô. Este hokku fue incluido en la introducción en prosa a Peregrinaje a Kashima (Kashima mairi 鹿島詣).

ゆきは不申先むらさきのつくばかな
Yuki wa môsazu / murasaki no / Tsukuba kana

Huelga hablar de la nieve:
¡Monte Tsukuba
de color púrpura!

8.
Yosa Buson 与謝蕪村 (1716-1784), poeta de haikai y pintor.

行春やむらさきさむる筑羽山
Yuku haru ya / murasaki samuru / Tsukubasan

¡Abril termina!
Compruebo que es morado
Monte Tsukuba.

 


9.
Kobayashi Issa 小林一茶 (1763-1828), monje de la Escuela de la Verdad de la Tierra Pura (Jôdoshinshū 浄土真宗) y poeta de haikai.

よしきりや空の小隅のつくば山
Yoshikiri ya / sora no osumi no / Tsukubasan

¡Un carricero!
Y, en un rincón del cielo,
Monte Tsukuba.

冬枯や垣にゆひ込つくば山
Fuyugare ya / kaki ni yuikomu / Tsukubasan

¡Marchitez invernal!
Monte Tsukuba apresado
por aquel seto.

炭舟や筑波おろしを天窓から
Sumifune ya / Tsukuba oroshi o / atama kara

Barco carbonero.
El viento del Tsukuba
por la claraboya.

El viento que desciende de Monte Tsukuba (Tsukuba oroshi 筑波おろし) es en realidad una corriente invernal que atraviesa el sur de Ibaraki hacia Chiba, regiones desde las que se ve la montaña

10.
Masaoka Shiki 政岡子規 (1867-1902), reformador de la poesía japonesa, haikuísta, poeta de tanka y editor.

秋風や鳥飛び盡す筑波山
Akikaze ya / tori tobitsukusu / Tsukubasan

¡Viento otoñal!
Las aves vuelan hasta agotarse.
Monte Tsukuba.

名月や彷彿としてつくば山
Meigetsu ya / hôfutsu to shite / Tsukubasan

¡Luna de la cosecha!
Me la recuerda
Monte Tsukuba.

赤とんぼ筑波に雲もなかりけり
Aka tonbo / Tsukuba ni kumo mo / nakarikeri

Roja libélula.
Ni una nube tan solo
allá en Tsukuba.

いつはあれといつこはあれと日の本の春はつくばゆ朝日さしのぼる
Itsu wa are to / itsu ko wa are to / hi no moto no / haru wa Tsukuba yu / asahi sashinoboru

Es como siempre,
así como siempre ha sido:
la primavera
de Japón es Tsukuba.
Se alza el sol matutino.
11.
Nagatsuka Takashi 長塚節 (1879-1915), poeta de tanka discípulo de Masaoka Shiki 政岡子規 y novelista. Nació y creció en un pueblo de Ibaraki desde el que es visible el Monte Tsukuba.

筑波嶺に降りける雪は白駒の額毛に似たり消えずもあらぬか
Tsukubane ni / furikeru yuki wa / shirokoma no / nukage ni nitari / kiezu mo aranu ka

La nieve caída
en el Monte Tsukuba
de una yegua alba
se asemeja a las crines.
¿Tampoco se esfumará?

夕さればむらさき匂ふ筑波嶺のしづくの田居に雁鳴き渡る
Yū sareba / murasaki niou / Tsukubane no / shizuku no tai ni / kari naki wataru

Pasan los gansos
graznando sobre campos
que riega el Tsukuba.
Al llegar el ocaso,
reluce color púrpura.

蜀黍の穗ぬれに見ゆる筑波嶺ゆ棚引き渡る秋の白雲
Morokoshi no / honure ni miyuru / Tsukubane yu / tanabiki wataru / aki no shirakumo

Monte Tsukuba
visible entre las espigas
del campo de sorgo
Blancas nubes de otoño
se deslizan flotando.

筑波嶺に雪は降れども枯菊の刈らず殘れるしたもえに出づ
Tsukubane ni / yuki wa furedomo / karegiku no / karazu nokoreru / shitamoe ni izu

Aunque ya neva
sobre el Monte Tsukuba,
el no cortar
los crisantemos secos
es porque quedan brotes.

12.
Mizuhara Shūôshi 水原秋桜子 (1892-1981), médico obstetra con doctorado a cargo de la Oficina Médica del Ministerio de la Casa Imperial, profesor de ginecología en el Colegio Médico de Shôwa (Shôwa Igaku Senmongakkô 昭和医学専門学校), haikuísta discípulo de Takahama Kyôshi 高浜虚子 y de Matsune Tôyôjô 松根東洋城, luego adalid del haiku de vanguardia y editor. La siguiente secuencia de haikus (renku 連句) lleva el título de «Los orígenes kármicos de Monte Tsukuba» (Tsukubasan engi 筑波山縁起), fue compuesto en 1927 después de ver el texto del mismo nombre en el santuario e inscritos en 1979 en un monumento en los terrenos del mismo.

わだなかや鵜の鳥むるゝ島二つ
Wada naka ya / u no tori mururu / shima futatsu

Centro del mar:
dos islas en que se juntan
los cormoranes.

天霧らひ男峰は立てり望の夜を
Amagirai / omine wa tateri / mochi no yo o

Entre la niebla,
la Cumbre Viril se alza:
el plenilunio…

いづみわく女峰の萱の小春かな
Izumi waku / nyohô no kaya no / koharu kana

¡El suave invierno
en pastos de la Cumbre Hembra
donde mana agua!

国原や野火の走り火よもすから
Kunibara ya / nobi no hashiribi / yomosugara

¡Vastos terrenos!
Crepita el fuego agrario
toda la noche.

蚕の宮居端山霞に立てり見ゆ
Ko no miyai / hayama kasumi ni / tateri miyu

Santuario de polillas:
ver que se yergue
al pie en la niebla.

 
13.
Katô Shūson 加藤楸邨 (1905-1993), especialista en literatura japonesa, profesor de la Universidad de Ciencias y Humanidades de Tokio (Tôkyô Bunrika Daigaku 東京文理科大学), haikuísta discípulo de Mizuhara Shūôshi 水原秋桜子, selector de la sección de haiku del periódico Asahi 朝日 y miembro de la Academia Japonesa de las Artes (Nihon Geijutsuin 日本藝術院).

筑波嶺の消えて畦火も衰へぬ
Tsukubane no / kiete azebi mo / otoroenu

Fuego entre tierras
mengua ya al eclipsarse
Monte Tsukuba.

東風吹くや岩戸の神の二はしら
Kochi fuku ya / Iwato no kami no / futahashira

Las dos deidades
de la puerta de roca.
¡Sopla el levante!

14.
Kanbara Eiji 神原栄二 (n. 1932).

初筑波午後へむらさき深めけり
Hatsu Tsukuba / gogo e murasaki / fukamekeri

Primer Tsukuba:
hacia el ocaso el púrpura
se profundiza.

15.
Nenokawa Naoyuki 布川直幸 (n. 1945), haikuísta discípulo de Shimizu Keiko 清水径子, editor, miembro de la Asociación de Haiku Moderno (Gendai Haiku Kyôkai 現代俳句協会) y de la Asociación de Autores de Haiku de la Prefectura de Ibaraki (Ibarakiken Haiku Sakka Kyôkai 茨城県俳句作家協).

初富士に面と向かひて初筑波
Hatsu Fuji ni / tsura to mukaite / hatsu Tsukuba

Dirijo el rostro
al primer Monte Fuji.
Primer Tsukuba.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-..-

 

 

Junio 2022

Passejant per les pistes i corriols propers, aprofito un dia més per amarar-me de natura. És primavera, quan surto de casa la temperatura és ideal. Fresca a primera hora, m’ajuda a entrar en calor, mentre el cap es va buidant i s’adapta a l’entorn. De mica en mica, començo a percebre els petits detalls que m’envolten, desapareixen els neguits del dia a dia.

brunzit d’abelles

immòbil sobre l’ortiga

l’aranya cranc*

Encara que no el vegi, el xisclet d’un aligot* en fa imaginar el seu vol en cercles, per sobre del bosc i els prats. A la llunyania se senten les esquelles del ramat que pastura entre els roures, darrere els matolls que hi ha uns metres més enllà, unes corredisses precedeixen l’udol de la gossada que s’acosta. Han ensumat el senglar.

Entre brucs florits, l’olor del romaní m’acompanya fins al mirador. M’aturo una estona contemplant els núvols prims que passen sobre els arbres.

Video https://youtu.be/rmtJ3xxyWPI

 

*https://macronatura.es/2019/09/16/arana-cangrejo-de-las-flores/

* https://es.wikipedia.org/wiki/Buteo_buteo

-.-

Paseando por los caminos y senderos cercanos, aprovecho un día más para empaparme de naturaleza. Es primavera, cuando salgo de casa la temperatura es ideal. Fresca a primera hora, me ayuda a entrar en calor mientras la mente se va liberando y se adapta al entorno. Lentamente, empiezo a percibir los pequeños detalles que me rodean, desaparecen las preocupaciones del día a día.

zumbido de abejas

inmóvil sobre la ortiga

la araña cangrejo*

Aunque no lo vea, el chillido de un ratonero* me hace imaginar su vuelo en círculos, sobre el bosque y los prados. En la lejanía se oyen los cencerros del rebaño que pasta entre los robles, detrás de los matorrales que hay unos metros más allá, unas carreras preceden el aullido de la jauría que se acerca. Han husmeado el jabalí.

Entre brezos floridos, el olor del romero me acompaña hasta el mirador. Me detengo un rato contemplando las delgadas nubes que pasan sobre los árboles.

Video https://youtu.be/rmtJ3xxyWPI

*https://macronatura.es/2019/09/16/arana-cangrejo-de-las-flores/

* https://es.wikipedia.org/wiki/Buteo_buteo

Junio 2022

Haibun 33

En el último latido del invierno brota la primavera…

Cada paso que doy es un silencio que se hunde en la arena… nadie cerca, sólo la mar y sus mil perfiles antes de morir en la orilla… el viento se hace añicos en mi cara.

Camino, paso a paso… A lo lejos, casi posado sobre el horizonte, arrastrado por el práctico, maniobra un buque granelero para entrar al puerto. Huele a mar… una mar que no sabe de silencios.

En la bahía luce el sol, llueve… un sol frío, una lluvia fría… late, ya débil, el corazón del invierno. Recorro la playa, sorteo las algas y la madera que anoche arrastró la tormenta. En una charca, dejada por la marea, un pequeño pez nada ajeno a la mar.

Charrán patinegro

Entre idas y venidas revolotean, gritones, un grupo de charránes… ancestrales graznidos que ponen verbo al cielo. Sigo con la mirada el vuelo acrobático de uno de ellos… cernido en el aire, sin demora, inicia su vertical y vertiginosa zambullida… la mar se rompe… en su pico da los últimos coletazos un pez.

En la orilla se deshace la espuma de la última ola… se deshace mi mirada atrapada como el pequeño pez que gira y gira en una charca ajeno a la mar.

La bruma va cubriendo la bahía, el mundo se empequeñece… Poco a poco, paso a paso, continúo con el paseo. En la playa vuelve a soplar el viento…

un viento suave…

parece que me mira

la gaviota muerta

 

Asturias, donde la tierra siempre es verde.

                                                                                 Alfredo Benjamín Ramírez Sancho
Asturias (España)

Mayo 2022

CONSTRUIR

Junto a la ría,
de gaviotas olvidada,
la vieja hélice.

 

DECONSTRUIR

Ayer, ¿o fue anteayer?, de uno de estos días de primavera, hice el mismo largo paseo mañanero por la ría de Avilés –ciudad donde desde hace dos semanas me ocupa mi afición por la cerámica–. A un lado del paseo, en el suelo, había objetos de hierro, testigos mudos y herrumbrosos de la otrora floreciente industria siderúrgica de esta ciudad asturiana. Al observar una gran hélice de hierro, hoy inútil dormida sobre la hierba, que pudo ser parte de algún mecanismo de los Altos Hornos o tal vez de algún barco, me vino la imagen común en los puertos de las gaviotas que siguen el rastro de los barcos cuando estos se acercan a tierra, los barcos que todavía hoy creo que se mueven ayudados por la propulsión de hélices.

     En otro tiempo los movimientos de esta hélice, que hoy yace ruinosa, pudieron ser saludados por decenas de gaviotas ansiosas. Hélice ruinosa, pero viva. Hoy, entre sus aspas crece la hierba y asoma alguna flor. El olvido, pasaporte del tiempo, no acabará  con la vida de esta vieja gloria. Inútil, pero viva.

Sobre el olvido renovado por la presencia de una flor, también inspirado en un día de primavera, hay un hermoso poema de Masaoka Shiki que deseo compartir con los lectores del Rincón del Haiku.

Wasureorishi
Hachi ni hana saki
Haruhi kana.

忘れ おりし
鉢 の 花 咲
春日 かな

En día de primavera,
de un tiesto olvidado,
brota una flor.

El poema de Shiki es infinitamente más directo y hermoso que el mío. En mis versos yo he tenido que pensar en las gaviotas para que la vieja hélice recobrara vida.  Recorrí un largo camino. El de Shiki es mucho más corto. Él no necesita mencionar el agente del olvido: solo el hecho. Y el milagro: la flor que brota donde nadie lo espera. Pero ahí debía de estar el haijin para ser testigo. “El haijin, testigo de milagros” sería un bonito título para un taller de haiku, ¿no os parece? De los milagros cotidianos que están ahí, a cada paso que damos, bajo cada mirada que lanzamos.

Mayo 2022

Haibun 32_

Manantial

Cielo plomizo
Al abrir la ventana
el canto del cuco.

                       Con las copiosas lluvias de primavera -algo inusitado en esta región del sureste de España- han renacido antiguos manantiales. Lo noté hace ya unas semanas cuando, en el transcurso de mi recorrido habitual por la pista forestal con Nivo, mi perro pastor de pelo blanco, escucho a mi izquierda un leve rumor de agua y, para mi sorpresa, veo reflejadas las primeras luces de la mañana en un regato que desciende por la cuneta, sortea algunos argayos, desaparece bajo las rocas desprendidas de la ladera y vuelve a manar más abajo formando pequeñas cascadas, espumas, remansos donde se para a beber el perro… hasta desaparecer definitivamente de mi vista en un escarpado valle donde desemboca. Lo imagino uniéndose con otros arroyos en un solo cauce hasta desparramarse por los bancales donde resplandece el verdor primicial de los almendros.

            De regreso por el mismo camino, ahora cuesta arriba, me lo vuelvo a encontrar. El dulce canto de sus aguas puras me redime del cansancio y mitiga el sudor de mi frente. De nuevo Nivo hunde sus patas en el recodo donde se aquieta el torrente y bebe hasta que lo rebaso.

            Lentamente el sol se eleva sobre la pinada.

 A ambos lados
las rosadas flores
de las jaras.

Paco Ayala ,
Ceutí   (Murcia)

Mayo 2022

Mar

Tarde fresca. Decido sentarme al borde del acantilado desde donde puedo observar el mar y su movimiento. Una placidez profunda llena los sentidos. Sombras de pequeñas nubes corren del mar a la meseta.

Pasados unos minutos retomo la caminata por el sendero.

Tarde de abril.
Fulgor en las chauchas
del algarrobillo

http://faunayfloradelargentinanativa.blogspot.com/2017/08/algarrobo-patagonico-prosopis-denudans.html

Me dirijo hacia la orilla, avanzando con el sonido de las piedras bajo los pies.

La marea comienza a subir; entre espuma, arenas grises y pequeños remolinos unas Ostreas máximas (fósiles del Mioceno inferior).

En una zona donde la marea no baja  el bullicio de gaviotas y gaviotines,  brillos de pececillos que saltan en gran cantidad,  indica la presencia de un cardumen de sardinas. Cada tanto  asoman unas aletas, rígidas, y me parece ver desaparecer un ave. Son ¿tiburones? Es probable, si fueran delfines emergen y dejan ver sus cuerpos.

Más adelante encuentro una cueva formada en una roca, con algas verdes que parecen una verdadera obra de arte.

Olor de algas
Entre fucus*
unos erizos

*alga parda

Abril 2022

Otoño

Aires  de otoño con nieblas, alternancia de días cálidos y frescos.

La achicoria silvestre sigue regalando la belleza de sus flores celestes a pesar que sus tallos,  al ritmo de la nueva estación,  se notan secos. Como muchas de las autóctonas de esta región, al querer cortar una rama, sus espinas se dejan sentir.

Con los primeros rayos de sol, la mañana apacible invita a disfrutar de la naturaleza. Sobre la piel ese aire fresco con retazos de olores marinos. Unos zumbidos de abejas, el trisar de golondrinas que llega desde algún lugar, el olor de pan horneando, se mezclan con el verde  de este pequeño espacio.  Recorro el sendero de lajas hasta llegar al rincón de rocallas y encuentro al cactus espiral en actividad, si, actividad!!!  El pimpollo, grande, alargado, hoy muestra los sépalos, blancos en el centro con borduras moradas hacia los extremos.

Tomo fotos y regreso a preparar el desayuno

Pasados unos minutos salgo, no puedo dejar de pensar en esa belleza que esta mañana me regala, vuelvo al lugar y noto que sigue el proceso natural   y  abre los pétalos, me quedo cerca con mi cámara fotográfica y  puedo seguir todo el proceso.

Mañana de sol

Infinidad de estambres

en el cactus espiral

Una maravilla de la naturaleza.

Ayer…hoy

La flor de ayer,

en el cactus espiral,

se ha cerrado.

Un cielo rojizo, la quietud de hojas amarillando en los álamos, los gorriones, el ruido de las olas desde la lejanía, bandadas de gaviotas…

Moscas…

Los pétalos atigrados

de la flor estrella

Abril 2022

Mentre camino pels entorns del poble, de vegades em pregunto per què aquest temps em costa de passar.

A partir de mitjans de febrer, encara que fa fred -molt de fred alguns dies- si no fa aire, l’ambient resulta molt agradable, fins i tot calorós a migdia. Normalment, es van repartint algunes pluges lleugeres al llarg dels dies, i no és estranya  alguna nevada a final de mes o la primera quinzena de març. El bosc es comença a poncellar, ja se sent el reclam dels ocells que cerquen parella per niar i, de vegades, se’ls pot arribar a veure portant branquillons d’aquí cap enllà.

remor d’aigua
empaita una femella
l’ànec collverd

Tot és un esclat de vida al meu voltant. Als carrers es veu més gent, més alegria i ganes de respirar a l’aire lliure, de seure a les terrasses a fer el vermut el diumenge. La roba és més acolorida, com els arbres o el sotabosc, en què algunes flors es van obrint. Els conreus verdegen…

el record d’una antiga pèrdua
arriba la primavera

-.-

Mientras camino por las cercanías del pueblo, a veces me pregunto por qué me cuesta pasar esta época.

A partir de mediados de febrero, aunque hace frío -mucho frío algunos días- si no hay aire, el ambiente resulta muy agradable, incluso caluroso a mediodía. Normalmente, se van repartiendo algunas lluvias ligeras a lo largo de los días, y no es extraña alguna nevada a fin de mes o en la primera quincena de marzo. El bosque empieza a brotar, ya se oye el reclamo de los pájaros que buscan pareja para anidar, y, a veces, puede llegar a vérseles llevando ramitas de aquí para allá.

rumor de agua
persigue una hembra
el pato de collar *

Todo es una explosión de vida a mi alrededor. Por las calles se ve más gente, más alegría y ganas de respirar al aire libre, de sentarse en las terrazas a tomar el aperitivo el domingo. La ropa es más colorida, como los árboles o el sotobosque, en que empiezan a abrirse algunas flores. Los cultivos verdean…

el recuerdo de una antigua pérdida
llega la primavera

* https://www.audubon.org/es/guia-de-aves/ave/pato-de-collar