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El camino del medio

Nadie que vaya
Por este camino.
Crepúsculo de otoño.[1]

 Bashô

Fotografía de Luis Bernardo Cano Jaramillo

Es frecuente asociar las enseñanzas del zen y el budismo con la negación del yo. Se atribuye al mismo Buda la afirmación del que el “yo” no existe, de que solo es una ilusión. Más adelante trataré de aclarar esta afirmación errada, pues en ninguna parte de la extensa escritura del canon budista, el buda dijo tal cosa. Nunca afirmó que el ser humano no tenga yo o que no exista el yo, sino que nos invito a “no ser yo” o “ser no-yo” (anatman en sanscrito, anatta en lengua pali)[i].

En palabras de nuestro maestro Vicente Haya: “Solo cuando el ‘yo’ es parte de la naturaleza tiene permitida su entrada en el haiku”. (Vicente Haya, El espacio interior del haiku, p.77). O también: “Por eso escribir haiku es una Vía; un entrenamiento del ‘yo’. En tanto es un proceso de despertar de los sentidos, de atención, de naturalidad, de autenticidad, de paciencia, de desprendimiento, de extinción de la vanidad… Los maestros del haiku nos enseñan que el poeta debe eliminarse de su poesía para que sus versos capten la esencia dinámica de la realidad”. (Vicente Haya, Haiku-dô. El haiku como camino espiritual).

El asunto del yo es entonces un asunto netamente práctico. Ni en el budismo ni en el haiku se trata de tener una teoría o explicación del yo; como cualquier cosa que aparece o existe en el mundo, el yo tiene su lugar y puede ser reconocido como algo más dentro de la naturaleza, siempre y cuando no reclame ninguna supremacía o exclusividad. Podríamos decir que el “entrenamiento del yo” que propone el maestro V. Haya corresponde al “cuidado de si” al “cultivo de sí” de las tecnologías del yo, como las formuló el filósofo Michael Foucault, en sus últimas reflexiones antes de morir. Cercanas pero diferentes del imperativo “conócete a ti mismo”, que apunta más a un sentido de conocer para controlar, para rechazar o renunciar en el sentido de algunas morales religiosas que consideran el cuidado de uno mismo como una inmoralidad, como un camino de perdición (la carne, el mundo como demonio).

“Eliminar al poeta” significa eliminar cualquier idea que se tenga de sí mismo y que se imponga sobre los demás seres del mundo. En la ausencia de una idea limitada de sí mismo es posible captar ampliamente la dinámica total del mundo.  O como lo expresaba bellamente el maestro Eckhart: “Mientras persista cualquier idea de Dios en tu alma. Dios no podrá entrar en ella”.

Renunciar a la idea del “yo” para dar cabida al mundo, tal es el propósito y el camino del haijin. Sus instrumentos están al alcance de su mano: dejando de lado los juicios, críticas, opiniones o puntos de vista, es decir la especulación mental, el haijin se entrena para estar atento, para vivir en el presente, para habitar en el justo lugar en que su contacto con el mundo se da a través de los órganos de los sentidos (seis en la concepción budista, que incluye la conciencia del cuerpo-mente, es decir la propiocepción como un sexto sentido).

[1] Sin yo, sin nadie, el testigo invisible que observa el camino solitario en el crepúsculo de otoño puede ser el haijin o cualquier persona que lea u oiga el haiku. Quizás por eso Cortázar apreciaba tanto este haiku. 99 HAIKUS DE MU-I, traducción de Vicente Haya y Keiko Kawabe, p. 30, MANDALA Ediciones, Madrid, 2010.

[i] Thanissaro Bikkhu (Geoffrey DeGraff), SELVES&NO-SELVE, THE BUDDHIST TEACHING ON ANATTA, https://www.accesstoinsight.org/lib/authors/thanissaro/selvesnotself.pdf

Cabrera G., Mª Concepción, Haikus del yo, Tesis de grado, U. de Sevilla, p. 22.

Haibun 47

Haibun 47

 

Hay un nublado tenue

Hay un nublado tenue, ligeramente gris. El aire, demasiado fresco y constante, impide que me cambie la camisa de manga larga y el pantalón. En la parada me dicen que hace tres días estuvieron a treinta y tantos grados. Por la ventanilla del urbano contemplo las hojas grandes y brillantes del almendro de Indias. Uno de esos troncos ha crecido inclinado hacia donde sopla el viento del norte, el famoso Norte. La “Villa Rica” se ha extendido, llega a Boca del Río. El puente sobre el Jamapa mide como una cuadra de largo. De niño me trajeron unos parientes. Recuerdo las ramadas, esos cobertizos con techo de palma donde vendían comida típica de la costa. Ahora hay edificios de muchos pisos y el poblado es una ciudad conurbada.

Se abren las nubes por momentos; me remango la camisa, pero la corriente de aire es fría y no tardo en desdoblar las mangas. Más tarde, junto al Foro Boca, se reúnen los jóvenes para la foto del álbum. El aire arrecia, lo mismo que el frío. Los varones van cómodamente vestidos de saco y corbata; mas, las chicas, con sus vestidos largos, escotados, sin estola, se cubren con las togas.

El rito de la foto se prolonga. Empieza a pardear la tarde. Las olas cubren, a cada embate, el musgo de las rocas. Chillan las gaviotas, un pelícano se zambulle. Aparece la forma oscura, inmóvil, de un rabihorcado. Semeja un papalote. No aletea. Lo pierdo de vista. Después, una escuadrilla de esas aves acapara la atención de los adultos:

-Miren unos albatros.

-Son fragatas.

-Aquí les dicen de otro modo, pero me asustan. Son como murciélagos gigantes.

-Sus líneas son angulares, aerodinámicas, más bellas que un avión de caza.

Esos reyes del aire, de patas cortas, me recuerdan la poesía “El albatros” de Baudelaire: “sus alas de gigante le impiden caminar”.

Sus figuras flotan en el cielo gris claro. Los pescadores los relacionan con la presencia de peces. Mis ojos se detienen en sus siluetas casi inmóviles, sus cuerpos de sombra.

Las palabras, muchas veces, suplantan las cosas, las deforman. También son capaces de señalar su presencia.

Silencio
Cuando lo nombro
se esfuma

*Villa Rica: Villa Rica de la Vera Cruz, nombre antiguo del puerto de Veracruz

Jorge Moreno Bulbarela “Jor”
Xalapa, Ver., México

La luz del haiku

Tan breve, tan abierto en su aparente sencillez, pero qué sorprendente… Hasta en su forma más convencional, el haiku es capaz de abarcarlo todo y de expresar los matices más sutiles. Si, por ejemplo, evocamos la luz, la memoria se enciende con un caleidoscopio de imágenes, que afloran desde todas partes y se imponen, se mezclan y se relacionan, más allá de los nombres que las imaginaron; como si, siendo ya tan nuestras, acabaran por ser anónimas: el pálido centelleo de la escarcha; la niebla luminosa flotando en el aire del embarcadero, y la niebla con llovizna que impide ver el Fuji; el rastrojo que empieza a ennegrecerse con el primer chubasco; aguas turbias fluyendo bajo las flores de cerezo; la marea olvidada entre las piedras, junto a algas verdosas; el color de unos iris un día de lluvia y la emoción al ver de pronto unas violetas en el camino; la sombra de cada cosa, intensificada por la luz del otoño, o desvelada al bajar la marea…

                En los límites del haiku clásico -17 sonidos y palabra o expresión estacional-, no hay límite. Tokugen nos propone este enigma: si nos fijamos bien, no hay nada tan negro como la nieve. Bashô se atreve a hablar del grito, casi blanco, de los patos junto al mar ya oscuro; y Buson -evocando quizá al gran maestro- ve cómo un viento súbito hace empalidecer a las aves acuáticas. A lo largo del tiempo, los poetas de haiku contemplan la Vía Láctea -tenue, pero deslumbrante- y la describen de mil maneras: sobre un mar revuelto, sobre los arrozales, colgada sobre la cima del monte, entrevista por la ventana rota, velando el baile de un borracho, acompañando a la mujer que regresa sola con su fardo de arroz o a la enamorada que acude con el pelo mojado a una cita… ¿Y la luna? Bashô la ve huir entre las ramas goteantes de lluvia, y Taigi asocia la luna brumosa con el chasquido de una red, río abajo.

¿Qué decir de la gran luna llena, de la que un niño se encapricha, y ante la cual se siente peor el mudo que el ciego? Esa luna se detiene un instante sobre las flores para admirarlas, hipnotiza a la libélula, desvela y enmudece a sus contempladores, alumbra a quien lee una carta, ilumina la niebla que gatea sobre el agua, consuela al solitario y recibe la gratitud de quien escribe su último poema: el del adiós… Mokkoku habla de las “gotas de luna” que suben a bordo con la red barredera; observación que recuerda lo que Sei Shônagon anotaba, ocho siglos antes: “En una noche de clara luna, cuando se cruza el río, me fascina ver el agua dispersarse en gotas de cristal al paso de los bueyes”. Chiyo-ni compara la “flor de luna“ (yûgao) con la piel de una mujer al desnudarse (Yûgao es el nombre de una de las amantes secretas del príncipe Genji), pero Chiyo-ni se fija también en el rojo de labios que fluye con las aguas primaverales, en la libélula que persigue su propio reflejo, y en las jóvenes hierbas: en el resplandor del agua entre hoja y hoja…

                Todo lo que brota, florece o se marchita, se llena de luz. Y vuelven a bullir las imágenes. La garza blanca se hace invisible en la nieve, pero la nieve resalta la palidez violeta de la “flor de u” y la esbeltez del ciervo, y su fulgor inunda de quietud la casa… Hay una flor tan blanca, que no deja ver el rocío; dos valles que se alumbran uno a otro bajo el relámpago; una hortensia dudosa que acaba decantándose por el azul… El oro empañado y el verdor fresco avivan la nostalgia de Chora por los tiempos antiguos, un sentimiento compartido por Tanizaki en su “Elogio de la penumbra”, cuando habla, por ejemplo, de la estancia más apartada de la casa, cuyos tabiques móviles y biombos dorados “captan la extrema claridad del lejano jardín”: “¿No han percibido nunca sus reflejos, tan irreales como un sueño? Dichos reflejos, parecidos a una línea del horizonte crepuscular, difunden en la penumbra ambiental una pálida luz dorada… A veces, el polvo de oro que hasta entonces sólo tenía un reflejo atenuado, como adormecido, justo cuando pasas a su lado se ilumina súbitamente con una llamarada y te preguntas, atónito, cómo se ha podido condensar tanta luz en un lugar tan oscuro…”

***

Agosto 2023

Les saludo desde un frío Santiago. Al elegir el haiku de este mes, me encuentro en la disyuntiva estacional entre elegir un haiku que se ajuste a la estación del hemisferio sur, en el cual me encuentro físicamente, o del hemisferio norte, en el cual está Japón, o que calce con el calendario lunar en uso en la época de Bashou. Al final he decidido elegir uno de fines de verano, y que viene compilado en la que, probablemente, sea la obra más conocida del maestro en el mundo entero, el Oku no hosomichi.

桜より松は二木を三月越シ

sakura yori matsu wa futaki wo mitsuki goshi

desde el cerezo al pino de dos troncos he visto pasar tres meses

Bashou comienza su famoso viaje relatado en este “kikou” o crónica viajera, a inicio de primavera, ocasión marcada por el florecimiento de los cerezos, y después de tres meses de camino llega al pino de Takekuma, hito natural famoso en la literatura desde tiempos remotos, ya que es un árbol que creció con dos troncos. Lo famoso del lugar puede ser atestiguado por la gran cantidad de poemas en que es mencionado o utilizado como tema compositivo, de los cuales Bashou toma inspiración.

Tenemos, para comenzar, un poema de Tachibana no Suemichi (¿? – 1060), compilado con el número 1041 en el Rollo XVIII de la cuarta antología imperial, Goshuui Wakashuu, compilada el año 1086.

 

武隈の松は二木を都人のいかがと問はばみきとこたへむ

takekuma no matsu wa futaki wo miyakobito no ikaga to towaba miki to kotaemu

en Takekuma los pinos entrelazados, si la gente de la capital me pregunta ¿cómo son? Responderé que he visto sus dos troncos

 

Este tanka puede sonar demasiado descriptivo, pero era la función requerida, ya que Suemichi lo compuso al visitar Takekuma en camino a Michinoku en compañía de su padre, Tachibana no Norimitsu.

El tanka que sigue en esta antología, Goshuui Wakashuu, compilado con el número 1042 es de Nouin (988 – 1051), y utiliza el mismo tema.

 

武隈の松はこのたび跡もなし千歳を経てや我は来つらん

takekuma no matsu wa kono tabi ato mo nashi chitose wo tate ya wa wa kitsuran

del pino de Takekuma en este viaje no queda ni rastro, aunque pase una eternidad volveré

 

Los “uta makura”, lugares utilizados en poesía, y los “meishou”, lugares famosos, ofrecen al poeta y al lector un mundo detrás de unas pocas palabras; mundo que hay que conocer y comprender para poder apreciar la complejidad de contenido escondida detrás de estos versos engañosamente cortos.

“武隈の松 takekuma no matsu”, el pino de Takekuma, tiene como rasgo característico los dos troncos o “二木 futaki”; algunos lo interpretan como dos árboles unidos o entrelazados, por lo que se utilizaba en poemas románticos o de amistad. También es interesante notar el uso de la palabra pino o “松 matsu” que tiene su kakekotoba (palabras homófonas) en el verbo esperar, que se dice de la misma forma “待つ matsu”. Otra homofonía con la que Bashou juega en el haiku, es la de “三月 mitsuki” tres meses, que suena parecido al verbo ver “見 mi”, y que combinado con “より yori”, partícula que puede utilizarse para hacer comparación o marca de tiempo. Considerándola con la última acepción, sería “desde”, es decir, “desde que vi los cerezos hasta que llegué en mi viaje al pino de Takekuma, han pasado tres meses”. Una vez más permitiendo entregar muchísimo más significado del que los 17 sonidos nos pueden ofrecer a simple vista.

Espero hayan disfrutado del camino por el que los llevé en este artículo, el cual, así como los de montaña que van y vienen entre los árboles, lo hace entre las palabras y los poemas, el tiempo y los poetas ¡Que tengan un hermoso mes de agosto!

¡¡Imágenes, imágenes, imágenes!! (1 de 2)

Una de las cosas que nos puede dar una idea de la trascendencia de Shiki en la cultura japonesa, es la cantidad de imágenes que se crean sobre él y se muestran en la red (dibujos, caricaturas, carteles, obras de arte como pinturas, relieves o esculturas, sellos, etc.). A continuación, una amplísima muestra de lo hallado. Recomendamos la visualización detenida de las mismas, pues algunas contienen curiosos matices imperceptibles en una mirada superficial. Se añade (o deja puesto) el nombre del autor/a cuando ello ha sido posible.

Empezamos con este curioso cartel que anuncia «El día del caqui». Claro, quién mejor que Shiki:Lo dicho, es a propósito de la celebración el 26 de octubre, del Día del caqui, y el dibujo con caqui y templo, hace referencia al famoso haiku de Shiki:
    Comiendo caquis: / el sonido de la campana / del templo Hôryûji

¡Sorprendente! Esta imagen que sigue, aunque no lo parezca, está hecha exclusivamente con manos, no se ve otra cosa en cabeza, letras, fondo  y ropa que no sean manos… amplía, amplía…

Y a continuación… ¿eso? ¿qué mira Shiki de reojo? ¿eso? ¡Su oreja! Porque su oreja es él…y la oreja de ese otro él vuelve a ser él … en fin un lío, mejor observar despacio… nuevamente… amplía…

 

Y caricaturas, imágenes y dibujos a decenas…

 

 

 De Suichi

 

Ilustración para un texto en prosa que escribió 3 días antes de morir: Mañana del 14 de septiembre. Shiki escucha como un vendedor pregona natto desde la calle.

 

 

 

 

 

 

Imágenes de  Una cama de enfermo de seis pies de largo hecha en comic. Y más comics…

Unos sellos:

 

 

Matsuyama fu la tierra que vio nacer a las dos grandes figuras literarias del periodo Meiji, Soseki y Shiki (grandes amigos por otra parte) y por ello el frecuente que se le homenajee conjuntamente: relieves, monumentos, muñenos, sellos, carteles…

De Warabi-za

 

Y aún quedan muchísimas más, algunas muy interesantes, pero ya una selección de ellas las reservamos para la próxima entrega y evitamos el atracón.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los orígenes espirituales del haiku 5. El Confucianismo (1 de 2)

El confucianismo aportó cierta sobriedad, reserva, falta de extravagancia e hipérbole, brevedad y concisión, y un sabor moral que a veces puede percibirse vagamente, pero que nunca se separa, como en Wordsworth y Hakurakuten, de la poesía misma. La relación entre haiku y el confucianismo es tanto más profunda cuanto que la influencia de uno sobre el otro es aún más sutil, debido a la aparente disparidad entre ambos. Pero el confucianismo es mucho más poético de lo que la mayoría de la gente supone. De hecho, como el cristianismo y todas las demás religiones, se puede decir que lo que hay en él de poético es verdadero, usando la palabra verdadero en el sentido de algo que alimenta la vida del hombre, que puede ser absorbida en nuestra propia vida y, sin embargo, tener vida propia, que es orgánica y creciente. Por ejemplo, al comienzo de las Analectas, Confucio dice:

有朋自遠方来、不亦禁平

¿No es delicioso tener un amigo que viene de tan lejos?

 

Bashō lo repite en:

淋しさを とうてくれぬか きりひとは

Sabishisa wo   toute kurenu ka   kiri hito-ha

Una hoja de la paulonia ha caído;
¿Por qué no vienes a mí
en mi soledad?

(Bashō[1])

dirigido a Ransetsu.

 

En Confucio nunca se olvida su amor por la música y la poesía. Su devoción por las Odas, su desconocimiento del sabor de la carne durante tres meses después de escuchar cierta pieza de música[2], esto es lo que le dio el poder de influir en la raza china durante tres mil años. Los hombres son poetas y músicos en un sentido en el que no son filósofos ni sabios. No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra poética que sale de la boca de Dios. Confucio dijo:

子目興於詩,立於薦、成於築(論語八八)

Levántate con poesía;
párate con propiedad;
crece con la música.

 

La mente se despierta con la poesía, se mantiene firme con la corrección…, y se perfecciona con la música. Esta cualidad poética, musical y encantadora en los actos y palabras de Confucio le hizo difícil de entender, y es por eso que dijo:

 

得其門者或寡英       (論語十九、ニ十八)

Pocos son los que encuentran la puerta

 

Si Confucio hubiera sido un mero moralista, nunca podría haber dicho esto.

Confucio se acerca mucho al Zen y al haiku en el siguiente pasaje:

子在川上日、逝者如斯夫、不舎書夜

(論語九、十六)

De pie junto a un arroyo, Confucio dijo:

“*No cesa ni de día ni de noche, fluyendo sin cesar así”.

 

El Zen no consiste tanto en captar directamente el significado de algo, como en expresarlo sin expresarlo. Esto también es peligroso, pero no tanto como las palabras. Confucio mismo dijo,

不知言無以知人也

(論語二十、 三)

Si no conoces (el significado de) las palabras,

no conoces a los hombres.

 

Un ejemplo de ello es una frase como “Sin conocer la corrección, no podemos establecernos”[3]. Si tomamos las palabras “conocer”, “decoro”, “establecerse”, en su significado cotidiano, antipoético, intelectual, esta afirmación tiene poco sentido, además de ser fría y pedante, sin poder para conmovernos. Pero si tomamos “saber” como “creer y tener fe en”, “confiar en”; “propiedad” por “un modo armonioso de vivir”, “un modo poético de manera poética de hacer las cosas”, “una profunda e interior rectitud de relación entre nosotros y todas las circunstancias externas”; “establecernos” significa “convertirnos en un verdadero ser humano, ser las vicisitudes del destino”. Entonces cobra vida la expresión de Confucio: “Mantente en lo correcto”. Lo sentimos en su propia persona lo que las palabras endurecen y desfiguran al tratar de manifestar. Con el mismo espíritu debemos leer pasajes como los siguientes, todos de las Analectas:

人落度哉、人帯慶設、(ニ十)

¿Cómo puede un hombre ocultar su naturaleza? ¿Cómo puede un hombre ocultar su naturaleza?

 

渡罪於天、無所遠也 (三、十ニ)

Quien ofende al Cielo, no tiene a quien rezar.

 

祭神如神在 (三、十ニ)

Él sacrificó a los espíritus como si los espíritus estuvieran presentes.

 

仁者安仁。(四、ニ)

Un hombre virtuoso encuentra descanso en su virtud.

 

Hay rastros de elementos taoístas en las Analectas:

季康子恵盗、 問於孔子、孔子 日萄子之

(十ニ、 ナ八)

君子之風、小人之徳草、草上之風必低。

不欲、 賞之不稿。

(十ニ、 十九)

Kikō estaba preocupado por los ladrones, y preguntó a Confucio sobre el asunto. Confucio respondió, “Si no tuvieras deseos, no robarían, ni siquiera por recompensas”.

El sabio es el viento, la gente común la hierba; con el viento encima, la hierba debe doblarse.

 

El animismo del que surgieron la religión y la poesía y que sigue siendo la fuente y la fuerza motriz de toda nuestra religión y la poesía de hoy, puede ilustrarse, en el pensamiento chino primitivo de la Doctrina del Medio, Capítulo XVI:

子日、鬼神之鶴徳、 北盛犬平、鴨之而売

見、鴨之而ル、管物 而不可遺

Confucio dijo: “El poder de los espíritus, ¡cuán abundante! Los miramos, pero no los vemos; los escuchamos, pero no los oímos; sin embargo, ellos sostienen todas las cosas, y nada es descuidado por ellos”.

 

En Rōshi XIV, éstas se identifican con el Camino:

親之不、 名目夷。 惑之不、名香、

神之不得、 名日。

Mirándola, no se ve, y por eso se la denomina incolora. Al escucharla, no podemos oírla y la llamamos insonora. Al querer sentirla, no podemos y la llamamos informe.

 

En China, como en Japón, la tendencia gradual, durante tres mil años, fue la mezcla de lo que empezaron siendo tres corrientes de pensamiento distintas: confucianismo, taoísmo y budismo, para añadir una cuarta, el zen. Como ejemplo tardío de esta síntesis podemos tomar el Saikontan, escrito por Kōjisei, こうじせい, se desconocen los detalles de la vida del autor, así como la fecha del libro, pero ya existía en 1624.

El Saikontan consta de trescientas cincuenta y nueve piezas de prosa y verso, la más corta de catorce caracteres y la más larga de setenta y cuatro. Esta forma de escritura epigramática, o algo así como un poema en prosa, se hizo popular y universal en la dinastía Ming. El nombre Saikontan significa literalmente “discursos de raíz vegetal”, para dar a entender que sólo un hombre de vida sencilla es capaz de ser poeta o filósofo. Llegó a Japón probablemente a través de sacerdotes zen[4] o comerciantes de Nagasaki.

Los siguientes extractos darán una idea de su no siempre asimilación completa del zen, el taoísmo y el confucianismo. Pero el lector debe aplicar cada uno de los extractos siguientes, cualquiera que sea su propósito ostensible, a la poesía, a la religión y a la conducta práctica, recordando que si estos tres no son uno, no son tres.

(七) 競肥辛甘非属味、r味具是淡、沖奇阜発

非至人、至人只是常。

Vino fuerte, carne grasa, cosas picantes, cosas muy dulces, no tienen verdadero sabor; el verdadero sabor es simple y llano. Lo sobrenatural, lo extraordinario no caracteriza a un hombre real; un hombre real tiene un comportamiento bastante común.

 

(ニー) 家庭有個還伸、日用有種資道、人能誠心

和無、愉色境言、使父録兄弟間形骸

意 交流、勝於調 息観心薬倍実。

El verdadero Buda está en el hogar; el verdadero Camino es la vida cotidiana. Un hombre que tiene sinceridad, que es pacificador, alegre en su aspecto y amable en sus palabras, armonioso en mente y cuerpo, con esa mente y ese cuerpo con sus padres y hermanos. Un hombre así es muy superior al que practica el control de la respiración y la introspección.

 

(六五)心頭光明、暗室中有青天、

金頭暗味、自日下生属鬼

Si la mente es clara, una habitación oscura tiene su cielo azul; si la mente es sombría, la luz del día da nacimiento a demonios y espíritus malignos.

 

(九一)貞士無心微薦、天郎就無心虚曜其哀、憶

人著意避藤、天郎就著、意中奪其競、可

見天之機構最前、人之智巧何能。

El hombre justo no tiene mente para buscar la felicidad; el Cielo por lo tanto, debido a esta falta de mente, abre su corazón más íntimo. El hombre malo se ocupa en evitar las desgracias; por eso el Cielo lo confunde por este deseo. ¡Cuán inescrutables son los caminos del Cielo! Qué inútil la sabiduría de los hombres.

 

(一五ー)道起一重公衆物事、富降人而接引、 堅是

一個幕常 家飯、

常簡事面警慢。

El agua no perturbada por las olas se asienta por sí misma. Un espejo no cubierto de polvo es claro y brillante. La mente debe ser así. Cuando desaparece lo que la nubla, aparece su brillo. No hay que buscar la felicidad; cuando lo que la perturba desaparece, la felicidad aparece por sí misma.

 

(一六ー)道起一重公衆物事、富降人而接引、 堅是

一個幕常 家飯、常簡事面警慢。

El Camino es propiedad común. Hay que señalar a todos los que nos encontremos. Aprender es tan común como comer arroz en casa. Según las circunstancias, debe aplicarse con circunspección.

 

(一七三) 鳥鼠常 留飯、憐峨不野燈、古人此等等念頭

是吾 人一懸生生之機、 無此便所謂士木形

弦面己。

Los antiguos dejaban arroz para los ratones y no encendían lámparas por piedad de las polillas. Esos pensamientos son el punto de operación de la humanidad en la vida. A falta de esto, un hombre es un mero cuerpo de tierra, un cuerpo de madera.

 

(二三ー)

売静夜之鐘葉、喚醒夢中之夢、

観澄涼之月影、窺見身外之身。

Al sonido de la campana en la noche silenciosa, despierto de mi sueño en este mundo de ensueño nuestro. Contemplando el reflejo de la luna en un claro estanque, veo, más allá de mi forma, mi forma real.

 

(二三二)

鳥語轟解穂是傷心之訣,

花英草色無非見道之文。

幕者要天機清徹、胸茨玲職、

鋼物皆有食心之蔵。

El canto de los pájaros, los sonidos de los insectos,
son todos medios de transmitir la verdad a la mente;
en las flores y las hierbas vemos mensajes de El Camino.
El erudito de mente pura y clara, sereno y abierto de corazón,
debe de hallar en todo lo que le alimenta.

Imagen 6

Texto: shiki soku ze kû = la forma es vacío, caligrafía de Takuan.

(NT: es una parte del Sutra del Diamante: shiki soku ze kû, kû soku ze shiki: “la forma es vacío, el vacío es forma”).

 

(二三三) 人解液有字博 、不解詩無字書、如弾有縦

琴、不知弾無琴、以川不以跡用、何

以得琴書之趣。

Los hombres saben leer libros impresos, pero no saben leer los no impresos.
Pueden tocar un arpa con cuerdas, pero no una sin cuerdas.
Aplicándose a lo superficial en vez de a lo profundo,
¿cómo van a entender la música o la poesía?

 

(二三六) 食得個中趣、五湖之煙月素入寸縄、

破得眼前機、 千古ン挑雄素鯖学撮

Si conoces el significado interno de las cosas,
la luna brumosa de los Cinco Lagos está dentro de ti.
Si comprendes la actividad de los fenómenos humanos,
el heroísmo y la nobleza de los grandes hombres de todas las épocas
están a tu alcance.

 

(二四八)

松覇浄、携杖猫行、立虚雲生破柄、

竹窓下、乾書高臥、 登時月使寒無。

Caminando solo, apoyado en un bastón, por un valle de pinos,
las nubes se elevan alrededor de mi túnica de monje.
Duermo con un libro como almohada junto a la ventana bajo los bambúes, me despierto cuando la luz de la luna empapa las mantas del suelo.

 

狐雲出軸、

去留 一無所係、

朗鏡懸、静陳雨不相干。

Una nube solitaria sale de la cueva de una montaña;
se queda o se va sin referencia a nada más.
El brillante espejo de la luna cuelga en el cielo;
es ajeno tanto a la quietud como al clamor.

 

(二六O)灘宗日、磯束喫飯倦束眠、詩旨日、眼敵

景歌日頭語、蓋極高演 於極不、至難出於

至易、有意者反遠、無心者自近也。

La secta Zen dice: “Cuando tengas hambre, come; cuando estés cansado, duerme”.
El objetivo de la poesía es describir en lenguaje común paisajes hermosos.
Lo sublime está contenido en lo ordinario, lo más difícil en lo más fácil.
Lo que es autoconsciente y ulterior está lejos de la verdad; lo que es está cerca.

 

(二七四)    身如不繋之舟、一任流行炊止 、 心似能

之木 何妨 刀割香塗。

El cuerpo es como un barco a la deriva, flotando o inmóvil en un estanque profundo.
La mente es como un trozo de madera quemada;
¿qué importa si es combustible partido,
o barnizado con laca perfumada?

 

(一七九)       譲易萌窓、丹砂研松間之露、 談経午案、

資磐宜竹下之風。

Leyendo el Libro de los Cambios en la ventana de la mañana,
froto un bastón de bermellón en el rocío que gotea de los pinos.
Discutiendo los sutras con un visitante, el sonido del kei
[Una especie de badajo de piedra, utilizado en un templo zen] se aleja con el viento de los bambúes.

 

(一八八)    古徳云、竹影掃確慶不動、月輪寧 水無

痕。吾儒云、水流任念境常静、花落離頻

意自間。 人常持北意、以夢事接物、身心

何等自在。

Un anciano respetable afirma: “La sombra del bambú se extiende sobre la escalera,
pero el polvo no se mueve. El círculo de la luna pasa a través del agua del lago, sin dejar rastro”. Uno de nuestros confucianos dice:
“El arroyo se precipita velozmente, pero todo está en silencio a su alrededor.
Las flores caen incesantemente, pero nos sentimos tranquilos”.
Si has comprendido el significado de esto, en todas tus relaciones con las cosas serás libre de mente y cuerpo.

 

—–Continúa en próxima entrega lunes 7 de agosto—–

 

[1] NT.- La autoría de Bashō, en este hokku, se discute.

[2]  士笹舞開紹、三月不知肉味(論語七、十三)

[3] Otra traducción de “permanecer con corrección”.

[4] Por ejemplo, Ingen,隠元 que se naturalizó en Japón, adonde llegó en 1654, diez años después del nacimiento de Bashō.

LOS ORÍGENES ESPIRITUALES DEL HAIKU 4. LA POESÍA CHINA

  1. La poesía china

La poesía china influyó al haiku tanto a través del Zen y el Taoísmo que la impregnaron, como por sus méritos puramente de romanticismo, nostalgia, cansancio del mundo y evocaciones de gloria. Esto último, que el haiku ha evitado por alguna razón bastante “japonesa”, puede ilustrarse con el siguiente poema de Ritaihaku (Li Tai Po):

望魔山源布

日照香焼生紫煙

逢香録有排前川

飛流直下三千尺

疑是銀河落九天

CONTEMPLANDO LA CASCADA DE MT. RO

El sol brilla sobre el pico Kōro, tiñendo de púrpura la niebla;

la cascada que se ve a lo lejos parece un largo río

bajando en línea recta tres mil pies:

¿No es la Vía Láctea cayendo desde el Noveno Cielo?

 

Los poetas de haiku más antiguos, al menos, casi nunca elegían esos temas, ni los trataban de forma tan vasta. Hay grandes cascadas en Japón, pero había algo instintivo, casi un encogimiento ante cosas tan tremendas.

Compárese con el siguiente poema de Bashō:

 

ほろほろと山吹散るか滝の音

Horo horo to   yamabuki chiru ka   taki no oto

Los pétalos de la rosa de montaña
caen de vez en cuando,
¿al son de la cascada?

(ver volúmen II, p.630)

(Bashō)

 

Qué delicado y particular es esto. La mente parece más intensa en la belleza y frescura de la escena. El siguiente ejemplo es de Hakurakuten.

 

清夜琴 興

月出鳥福識 彼然坐築林。

是時心境閑 可弾素琴。

清冷由木性 悟淡監人心。

心積和平策 木 正始音。

響飲菜動息曲能秋夜深。

正幣感元化 天地清沈

 

TOCANDO EL LAÚD AL FRESCO DE LA NOCHE

La luna ha salido, los pájaros están todos en sus nidos;

me siento tranquilamente entre los árboles, solo.

Ahora mi corazón descansa,

y es bueno tocar el laúd de madera blanca.

Fresco y claro, según su naturaleza,

fino y tranquilo, sigue al corazón humano.

La mente se llena del espíritu de paz,

mientras responde al antiguo modo de Seishi.

Los sonidos perduran y, vibrando, cesan.

La melodía termina, la noche de otoño es profunda.

El Sonido Verdadero se hace eco de los Cambios Primordiales;

el Cielo y la Tierra se serenan.

 

                                  Imagen 3

Paisaje, de Sōsheki.

Esta es la forma china de alcanzar la unidad. Cuando los comparamos, el japonés parece trivial, insignificante, casi un anticlímax:

 

水際もなくて古江の時雨かな          蕪村

Mizu-giwa mo   nakute furue no   shigure kana

Bajo la llovizna en Fume,
el borde del agua
desaparece.

(Buson)

La manera japonesa se expresa claramente en el siguiente verso del Zenritikushu:

維摩領開ロ、

枝上一輝吟

Yuima no quiere abrir la boca,

pero en la rama gorjea una sola cigarra.

 

La forma en que los poetas de haiku utilizan la poesía china varía según el poeta. Tomemos a Bashō y Buson como ejemplos típicos. Bashō leía constantemente a los poetas chinos para inspirarse y enriquecer su propia vida poética. Se encontró especialmente con Tōhō, (que no me atrae personalmente). En Oku no Hosomichi, las primeras palabras son una adaptación de algunas prosas de Ritaihaku:

光陰者百代之過客

El tiempo es un viajero que pasa sin cesar.

 

Bashō dice:

月日は育代の過客にして、行きかふ年も

又旅人なり

Los meses y los días son viajeros eternos; los años también son viajeros.

 

Más adelante, tenemos versos como:

片雲の風にさそはれて、

una nube solitaria invitada por el viento,

行く春や鳥啼き魚の目は涙

Yuku haru ya / tori naki uo no / me wa namida

Termina la primavera;
el llanto de los pájaros,
las lágrimas en los ojos de los peces.

(Bashō)

Son ecos de Tōhō.

臭天に白髪のうらみを重ぬとレへとも

Aunque el dolor y la ansiedad pesen sobre mí y encanecieran mis cabellos bajo un cielo extranjero,

proviene de un poema de Hakurakuten:

今年九月来央郷、

雨逸藩袋一時自。

En septiembre de este año llegué a la provincia de Go;

Ambos lados de mi cabello desordenado se volvieron repentinamente blancos.

 

El siguiente pasaje,

雲端につちふる心地して

Sintiendo como si la tierra cayera desde los bordes de las nubes,

proviene de un verso de Tōhō:

巳入風澄叛雲端

Entrando en la ventosa pendiente de piedra, los bordes

de las nubes llovieron polvo.

 

Otro ejemplo:

雨も又奇なりとせば、

雨 後の時色また頼もしと

Bajo la lluvia, el paisaje era maravilloso, y

después de la lluvia esperaba que lo fuera más.

Esto viene de uno de los dos poemas de Sotōba sobre Beber en el Lago, después de que la lluvia se despejara.

飲湖上、初晴後、 二首

Hay una descripción de Matsushima:

負へるあり抱けるあり、

見孫を愛するがどとし

Algunas (islas) aparecen como un niño de espaldas,

otras como un niño por delante, otras como un hombre

acariciando a sus hijos o nietos.

 

Probablemente proviene de «Mirando a las montañas» de Tōhō 倒峯,  Contemplando las montañas:

諸峰羅列似見孫

Todos los picos del archipiélago parecen hijos y nietos.

Hay algunos haikus de Bashō que se basan más o menos directamente en versos de Tōhō, por ejemplo:

猿を聞く人捨子に秋の風いかに

Saru o kiku hito   sutego ni aki no   kaze ikani

Triste ante el llanto del mono,
viendo al niño abandonado en el viento de otoño,
¿cómo se sentiría?

(Bashō)

Esto viene de 秋 興八首; Ocho poemas de diversión otoñal

撃渡寛下三撃涙

Oyendo a los monos, ¡verdaderamente tres lamentos lacrimosos!

Los versos de Bashō aparecen en el Nozarashi Nikkō y representan una experiencia real al pasar cerca del río Fuji. Es diferente en sentimiento del poema chino que proporcionó parte del pensamiento.

Estos son ejemplos concretos de la forma en la que los pensamientos y sentimientos de los poetas chinos pasaban continuamente por la mente de Bashō. Muestra cuáles eran sus ideales de la literatura, aunque su idea del haiku incluía algo nuevo y original, único de hecho, en la literatura universal. Pero con su haiku, toda esta vida poética china es absorbida completamente en la suya propia, y hay pocos ejemplos de préstamos directos. Algunos más se observan en algunos haiku sueltos.

Con Buson y otros poetas antiguos de haiku, encontramos algo muy diferente. En muchos de sus versos, Buson apunta al mismo objeto que los chinos. En casos extremos, de los que hay bastantes, toma frases enteras y las plasma en un nuevo escenario. En esta obra se pueden encontrar muchos ejemplos, pero aquí se cita uno como típico. El poema de Buson es:

 

春 夜 聞 拳

議湘の雁のなみだや ぼろ月

Shōshō no kari no namida ya oboro-zuki

                -Escuchando el laúd una tarde de primavera-

Lágrimas
por los gansos salvajes de Shōshō;
una luna brumosa.

(Buson)

El río Shōshō es el que desemboca en el famoso lago D’tei; es muy conocido por sus Ocho Vistas. Los gansos salvajes de Shōshō se mencionan en el poema de Senki, un famoso poeta chino, que se encuentra en el Tōshisen:

                                                                               帰雁

満湘何事等間岡

水碧沙明南岸音、

ニ十五紘弾夜月、

不勝清後部飛本

 

GANSOS SALVAJES QUE REGRESAN

¿Por qué se alejan tan ciegamente de Shōshō?

El agua es azul, la arena es blanca, el musgo

de ambas orillas es verde;

si se tocara el laúd de veinticinco cuerdas,

en una noche iluminada por la luna,

con la emoción abrumadora ¿no volverían?

Imagen 4

Mono, de Tôhaku

El laúd de veinticinco cuerdas era tocado por Gaō y Joei, las dos hijas de Gyō, que murieron en este lugar. Las “lágrimas” del verso de Buson están relacionadas con las dos hermanas. El título es de estilo chino, aunque parece ser original de Buson. Sus versos tienen un sentimiento totalmente chino y son tan de la sencillez y franqueza del haiku como es posible en diecisiete sílabas. Buson, probablemente oyó tocar el koto una tarde de primavera, y expresó sus propios sentimientos, utilizando el paisaje de Shōshō, el regreso de los gansos salvajes, las lágrimas de Gaō y Joei, como material, y añadiendo la luna brumosa, cambiando así la estación de otoño a primavera para encajar el elemento romántico. En otras palabras, el poema de Buson es literatura, es poesía, pero no es haiku, excepto en el sentido de que estemos dispuestos a aceptar cualquier cosa buena o interesante en forma de haiku como una contribución a la cultura y los placeres de la vida. Contrasta el verso anterior con un verdadero haiku de Buson:

洗足の盥も漏りてゆく春や

Senzoku no   tarai mo morite   yuku haru ya

También gotea
la pileta para lavarse los pies:
se va la primavera.

(Buson)

Aquí tenemos la armonía de una abstracción con una instancia concreta de ella, que sin embargo es también un acompañamiento puramente accidental. Este poema no es muy bueno, pero se ve como si estuviera en el polo opuesto de la poesía y la técnica anteriormente vista.

Otro de Ritaihaku, más cercano al espíritu del haiku, pero todavía algo difuso:

宿清漢主人

夜到清淡宿。

主人碧談真。

鷲撒掛星斗。

沈席響風水。

月落西山時。

                                                                         歌々夜猿起

 

ALOJAMIENTO EN UNA POSADA DE SEIKEI

Llegué a Seikei por la noche

donde mi amigo vive entre las verdes rocas;

entre los pilares bajo los aleros

las estrellas estaban colgadas,

crujido de hojas y goteo de agua cerca;

cuando la luna cayó detrás de las colinas del oeste,

surgió el grito nocturno de los monos: ¡güi, güi!

 

Como ya se ha dicho, los poetas japoneses, sobre todo los de haiku, tienen una tendencia natural hacia lo pequeño, lejos de lo magnífico, como si sintieran que hay algo bastante vulgar en lo grandioso de la naturaleza. Pero hay algunos haiku que, ciertamente, retratan los aspectos más vastos de la naturaleza, por ejemplo:

 

荒海や佐渡に横たふ天の河        芭蕉

Ara umi ya   Sado ni yokotau   Ama-no-gawa

Un mar salvaje,
y extendiéndose hacia la isla de Sado,
la Vía Láctea.

(Bashō)

 

Los poetas chinos, posiblemente a partir de la geografía y la historia de su país natal, nos ofrecen el tiempo y el espacio in extenso. El pasado, en el haiku, es casi siempre individual, no histórico. El espacio se siente en el cielo, tanto por el día como por la noche, pero hay poco de las vastas distancias en la tierra, cordilleras de montañas y llanuras interminables que encontramos en los poetas chinos.

En el siguiente poema de Hakurakuten, los dos últimos versos son bastante poco japoneses, tanto en su insinuación moralizante y general, y en la preferencia de lo grande y antiguo a lo pequeño y efímero.

秋蝶

秋花紫菜菜。 秋蝶黄非茸。

花低蝶新少。日暮涼風来

夜深白露冷。飛戯設西東。

紗紗花落遊。葉巳死叢中。

朝生タ倶死。 類各相従。

不見千年鶴。多接百丈松。

 

LA MARIPOSA DE OTOÑO

Las flores púrpuras del otoño florecen en profusión,

las mariposas amarillas del otoño revolotean de un lado a otro.

Las flores empiezan a caer, las nuevas mariposas son pequeñas;

al este y al oeste coquetean de dos en dos y de tres en tres.

El sol se pone, se levanta un viento frío;

las flores caen y se dispersan entre los arbustos.

La noche se hace más profunda, el rocío blanco es frío;

las mariposas ya han perecido en los matorrales.

Nacen por la mañana y mueren por la noche.

En mutuo acuerdo;

¿no has visto cómo la grulla milenaria

se posa tan a menudo en el alto pino?

 

Lo que sigue se llama Primavera Temprana, pero esto significa más bien Pensamientos en la primavera temprana.

 

早           春

営湾氷又響      景和 風復職,

 満庭田地孫      鷺葉生摘根。

  官舎情無事      日西斜施門。

  不開荘老恭       欲興何人言。

 

PRINCIPIOS DE PRIMAVERA

La nieve desaparece, el hielo se derrite,

el paisaje se suaviza, el viento es suave.

Los jardines y los campos están húmedos,

los jóvenes crecen junto a la valla.

En mi casa, todo es tranquilidad y ocio;

el sol de poniente inunda oblicuamente el portal.

Si no abro los libros de Rōshi y Sōshi,

¿con quién desearía conversar?

 

Las dos últimas líneas tienen una conexión tan remota con el título… que podemos decir que no tienen ninguna. El siguiente de nuevo habla de un cierto estado; el haiku es estar en él.

 

睡起髪

後亭変展足。 起坐春景春。

新登眼簡昏。無思心正住。

淡寂時一性。 歳閑遺高嵐。

了然此時心。 無物可職。

  本是無有郷。亦名不魔。

行噂興坐忘。 同藤無異路。

 

DURMIENDO, Y AL DESPERTAR, SENTADO TRANQUILAMENTE EN EL ATARDECER

En el cenador trasero dormí toda la tarde.

Levantándome, me senté allí, con la escena primaveral oscureciéndose.

Recién despertado, los ojos aún estaban apagados.

Pero mi mente estaba en reposo, sin pensamientos.

Silenciosa y desapegada, había vuelto a su unidad;

dejando a un lado la miríada de ideas, estaba vacía y quieta.

No hay nada por lo que podamos insinuar

la iluminación de un momento así.

Es simplemente el estado de es-no es,

llamado también “el reino de lo inútil”.

El estado de Zen, y de “sentada olvidadiza”.

Lo mismo en esencia, no son dos caminos.

Esta “sentada olvidadiza” Sōshi la explica como “mantener el cuerpo, haciendo que la inteligencia se retire, separándose uno mismo de la forma, descartando toda sabiduría”.

Rogers, Pope, Greene y Cowper dicen:

Mío sea un catre junto a la colina.

Feliz el hombre, cuyo deseo y cuidado,

unos pocos acres paternales atan.

Dulces son los pensamientos que saben a satisfacción.

O por una cabaña en algún vasto desierto.

Esto era poco más que una convención literaria en Inglaterra, pero en China y Japón realmente se practica. Nada atraía más que los poemas chinos de una vida de soledad. De los poetas chinos, el más famoso en este sentido es Tōenmei, cuyas descripciones en prosa y poesía de su retiro son clásicos también de Japón. Como ejemplo más breve podemos tomar el siguiente poema de Hakurakuten;

 

晩秋閑 居

地館門深少途迎

披夜閑坐養幽情

秋庭不描携藤杖

閑島様桐黄葉行。

 

UNA VIDA RETIRADA A FINALES DE OTOÑO

Vivo en un lugar retirado y apartado;

pocos vienen a visitarme.

Poniéndome la ropa me siento en silencio

y alimento mi paz mental.

El jardín de otoño, no lo barro;

con una vara de wistaria en la mano,

camino lentamente sobre las hojas amarillas de paulownia.

Esto está totalmente en el espíritu del haiku, especialmente la particularidad, la concreción y la sensualidad de los dos últimos versos.

Los poetas japoneses han estudiado la lluvia en todos sus aspectos, los diferentes tipos de lluvia, la lluvia ventosa y cortante, el tamborileo constante de la lluvia, el chaparrón, la lluvia silenciosa e invisible que Hakurakuten describe a continuación:

微雨夜 行

漢淡秋禁起。愉愉夜塞生。

自登衣裳湯。 無端亦無整。

 

CAMINANDO DE NOCHE BAJO UNA FINA LLUVIA

Nubes de otoño, vagas y oscuras;

la noche, solitaria y fría.

Sentí la humedad en mis ropas,

pero no vi ninguna mancha, ni oí el sonido de la lluvia.

La relación entre Hakurakuten y Sōshi es muy fuerte y profunda. El segundo capítulo de Sōshi, 物 論 se convierte en el tema de dos poemas de Hakurakuten que se alinea explícitamente con Sōshi en su visión del mundo y de la naturaleza humana:

 

曹物 二

青松高百尺。線派低敷中。

同生人塊間。長短各有分。

長者不可退。短者不可進。

若用此理推。窮通雨無間。

其               二

椿奈八千春。植花不縦宿。

中間復何有。再再孤生竹。

竹身三年老。竹色四時線。

離謝棒有飲。猫勝様不足。

 

1

El altivo pino verde mide treinta metros;

la humilde orquídea, sólo unos centímetros de verde.

Ambos viven entre el mismo cielo y la misma tierra;

cada uno tiene su parte de longitud y brevedad.

Lo que es largo no puede retraerse;

ni lo que es corto aumenta su estatura.

Un hombre que vive esta verdad,

nunca conocerá el dolor de la riqueza o la pobreza.

 

2

Ocho mil años, y la Camelia ha

alcanzado su primavera;

la flor de una Rosa de Sarón dura sólo un día.

¿Qué hay entre ellas dos?

Está el bambú, que crece por sí solo.

El bambú es viejo después de tres años,

sin embargo, es verde en todas las estaciones.

Aunque no se puede comparar con la Camelia,

supera con creces a la Rosa de Sarón.

Los segundos versos, (no puede llamarse poema) son una versión del final del primer capítulo de Sōshi. Hay otro de estos poemas filosófico-botánicos que reviste interés:

問                   友

種南不種丈、蘭生丈亦。

根菱相交長。弦葉相附策。

香査興臭葉、日夜倶長大、

鋼丈恐傷蘭、遊蘭恐芝、

南亦未能歳、支亦未能除

沈吟意不決、間君合何如、

 

UNA PREGUNTA A UN AMIGO

Planté una orquídea y no planté artemisa.

Pero la orquídea creció y la hierba de la taza también.

Sus raíces y raicillas se mezclaron y se extendieron;

sus tallos y hojas se entrelazaron y florecieron.

Los tallos perfumados y las hojas malolientes

Tanto de día como de noche crecían y se engrosaban.

Si deshierbo la artemisa puedo dañar la orquídea;

Si riego la orquídea, nutriré la artemisa.

Aún no estoy dispuesto a regar la orquídea,

ni puedo deshacerme de la artemisa.

Reflexiono y reflexiono y no puedo decidirme:

te pregunto, ¿qué debo hacer?

 

Este es el dilema del mundo práctico visto por el intelecto dicotómico, resuelto por la vida, por el vivir, que puede ser y no ser, hablar y callar, existir y no existir, en un mismo momento intemporal.

El budismo, los poetas chinos lo trataron a veces con seriedad y a veces con burla; ambas actitudes eran bien merecidas.

Al final de un breve poema, Pelos blancos, Hakurakuten hace las siguientes observaciones sobre la vejez y la muerte en particular, y la vida humana en general:

 

由来生老死、三病者相魔。

除却無生念、人間無薬治、

 

En la naturaleza de las cosas, vida, vejez, muerte,

estos tres males se suceden durante mucho tiempo.

Aparte de la creencia en algo más allá de la vida,

los hombres no tienen remedio.

 

Este 無生念 Es el pensamiento y la fe en algo que no es ni la vida ni la muerte, sino algo que trasciende ambas, pero que se puede vivir en este mundo.

En el siguiente poema, también de Hakurakuten, la visión budista del cuerpo se expresa de forma moderada y con sentido común :

                                                              平和な自由

亦英糖此身 赤莫脈此身

此身何足織  高却類橋根

此身何足豚 一楽虚鹿

無態亦無服 始是道造人

 

LIBERTAD PACÍFICA

No amo este cuerpo mío,

tampoco lo odio.

¿Por qué debería amarlo?

Es la fuente de todos los deseos y pasiones.

¿Por qué debería odiarlo?

No es más que un montón de polvo vacío.

Sólo si no lo odiamos ni lo amamos

podemos ser libres y estar en paz.

 

Aquí vemos el pensamiento de Sōshi mezclado con el pensamiento y la terminología del budismo. Hakurakuten se burla del budismo y de los monjes budistas en lo siguiente:

 

香火一燈一速、白頭衣職備名経、

何年飲著発聞酒、 直到如今華未醒

 

BURLÁNDOSE DE UN MONJE ANCIANO POR ADORAR LOS SUTRAS

Quemando incienso, encendiendo velas,

un monje anciano de pelo blanco está cantando

los Mil Sutra de los Mil Nombres de Buda.

¿Cuántos años lleva bebiendo el

vino de Sravaka?[1]

Hasta ahora nunca ha despertado de su estupor.

 

Aquí, sin embargo, está atacando la supersticiosa palabra escrita. No obstante, Hakurakuten era un independiente y habría atacado incluso a la propia poesía, por no hablar del Zen en cualquiera de sus formas. Ataca a Rōshi en su conocido poema:

議老子

言者不知知者歌、 此語吾開於老君。

若道老是知者、 縁何自著五千文。

 

 LECTURA DE RŌSHI

El que habla no sabe; el que sabe no habla:

así hemos oído a Rōshi.

Si Rōshi debe ser llamado erudito,

¿Por qué escribió cinco mil palabras?

 

También critica la doctrina de Sōshi sobre la unidad de todas las cosas, la identidad de los contrarios, de la siguiente manera:

議老子

荘生奔物同鯨一、我道 首同中者不同

途性道逢難一致、驚原終校藤能。

 

LECTURA DE SŌSHI

Sōshi reduce todas las cosas a una;

creo que en la unidad está la diversidad;

Aunque por su propia naturaleza viven en igual felicidad,

un fénix es ligeramente superior a una serpiente.

 

Sin embargo, en un poema escrito en su vejez, en un verso ocasional 是非 después de describir un día de su vida pasado en tranquila meditación y caminando solo por los campos, concluye:

 

一以貫、身世交相忘、.

若間此何許、此是無何郷

 

Percibiendo que lo relativo es lo absoluto.

Olvidándose tanto de sí mismo como del mundo,

¿Qué estado es éste?

Es el reino de la Inactividad Serena y Sin Yo [de Shōsi].

 

Como ejemplo de poesía china que es puro haiku podemos tomar el siguiente:

夜雨

早渋暗復歌、 滅叉明、

藤速知夜雨、 芭薫先有。

 

LLUVIA POR LA NOCHE

Un grillo chirría y calla:

la lámpara del canal se hunde y vuelve a encenderse.

Al otro lado de la ventana se oye la lluvia de la noche;

es la planta del plátano la que habla primero.

Se trata de dos haikus, en lugar de uno; primero:

Un grillo chirría.
Y se calla:
la lámpara del canal se hunde.

Se observará que así se evita el paralelismo, más o menos inevitable de los versos rimados. Los haikus son a la vez asimétricos en la forma y asimétricos en el pensamiento.

Sería mejor ordenar los versos así:

La lámpara del canal se hunde;
un grillo chirría,
y calla.

 

El segundo “haiku” es aún más adecuado a la forma del haiku ya que es la esencia del poema original:

 

Lluvia vespertina:
el bashō
habla de ello en primer lugar.

 

Imagen 5

Pájaros y flores, de Chōshō

La poesía de Hakurakuten es un ejemplo de la definición de “poesía pura” de George Moore.

Algo que el poeta crea fuera de su propia personalidad

Si entendemos por esta afirmación clara pero ambigua, que el mundo se refleja en la mente del poeta como en un espejo sin el crecimiento y la vida de la mente del poeta son idénticos al movimiento con el movimiento de las cosas fuera de él. Por las aparentes peculiaridades e idiosincrasias del poeta se corresponden exactamente con los caprichos del universo, y lo que expresa como sentimiento personal en su interior, es lo que crea de la nada, es lo que Dios hizo del vacío. La poesía pura nos parece, superpersonal, extrapersonal, y así es, pues tal poeta no habla para sí mismo, sino para la humanidad. Conviene recordar, sin embargo, con respecto a la poesía en general, y también para algunos haikus, que los propios prejuicios y caprichos personales de un poeta, debilidades y exageraciones, pueden producir versos románticos, subjetivos y líricos que, sin embargo, son poesía por el sutil poder que el poeta posee y nos otorga, de elementos personales y actitud subjetiva, y de situarse al margen incluso de ellos. Tal es, por ejemplo, la poesía de Heine. El siguiente verso de Shiki es de este tipo:

 

エ夫して花にランプを吊しけり

Kufû shite   hana ni rampu wo   tsurushi keri

Colgando un farol
en una rama en flor;
¡qué esfuerzo me tomé!

(Shiki)

 

En vista del gran número de citas de Hakurakuten, debe mencionarse que su influencia en la literatura japonesa fue muy fuerte desde el siglo IX hasta el XV. La obra Nōh, Hakurakuten, de Seami, es una prueba de ello, y representa la persistente influencia de quinientos años. Sumiyoshi,住吉 (o Suminoe 住江) dios del waka, devuelve a Hakurakuten a China:

住吉の融の力のあらん程はよも日本をば

従へさせ給はじ、 速に浦の度立ち師り徐へ

楽天

 

La fuerza del dios Sumiyoshi es tal que

no te permitirá conquistar Japón; rápidamente

regresa, Rakuten, sobre las olas de la bahía.

Como prueba de la amplia naturaleza de la influencia de Hakurakuten, especialmente entre las clases dirigentes y los literatos, podemos citar la siguiente anécdota de Breve historia de los emperadores, de Aoyama Enu, 1776-1842, sobre el emperador Takakura, octogésimo emperador de Japón, 1169-1180:

 

高倉天皇幼時、有献 楓者。天皇愛之、

藤原 信成 守之 。 一日、仕丁将飲酒、窮枝

為新以憶酒、 信成見而大驚牧仕丁、特之

罪、食天墓使信成 上其樹、 信成具奏其状、

叩頭請罪、天皇従容日、唐詩有去、林間

媛酒焼紅葉。誰教仕丁作此風流。無復所

間。

 

Cuando Takakura Tenno era joven, alguien

le regaló un arce, que él apreciaba mucho.

Ordenó a Fujiwara Nobunari que se hiciera cargo de él.

Un día, unos obreros del palacio,

con la intención de beber vino, cortaron algunas ramas

para hacer fuego y calentarlo. Nobunari, al ver

esto, se molestó mucho, los agarró e informó detalladamente al Emperador,

se postró y pidió ser castigado. El Emperador respondió con calma:

 “Un poema Tang[2] dice:

Quemando las rojas hojas de otoño, calentamos vino en el bosque.

¿Quién enseñó a los trabajadores un logro tan elegante?”

y no se habló más del asunto.

[1] Doctrina hinayana de la salvación personal.

 

[2] Este “poema Tang” es obra de Hakurakuten.

El shasei de Shiki. Compilación de textos imprescindibles.

Corregido, actualizado y ampliado a 1 de septiembre de 2023

El shasei, piedra angular del haiku moderno.

«El shasei de Shiki», una recopilación de los artículos que han ido traduciendo Jaime Lorente y Elías Rovira sobre este asunto, ya publicados en El Rincón del Haiku con algunos fragmentos extra. Disponemos así de una amplia obra sobre el shasei, piedra angular del haiku moderno. Sin duda, ofrece un conocimiento profundo sobre esta cuestión desde diferentes perspectivas.

Descargar desde este enlace:

El shasei de Shiki